Legisladores de México y EU la acusan de contaminante
Movilización en la frontera contra la reapertura de la empresa Asarco
Ciudad Juárez, Chih., 2 de febrero. La empresa American Smelting and Refinery Company (Asarco), que durante varios años se ubicó en El Paso, Texas, y que pronto podría recibir un permiso para reiniciar actividades, es la responsable directa de la alta concentración de plomo, cadmio y zinc, entre otros metales peligrosos con los que contaminó ambos lados de la frontera, reiteró un estudio dado a conocer esta semana.
A pesar de eso, el gobierno de México ha sido indiferente ante el problema de contaminación que generó esa compañía del lado mexicano, y tampoco hace nada por evitar su eventual reapertura, dijo el diputado local panista Salvador Gómez Ramírez.
El legislador señaló que un estudio elaborado por el químico Michael E. Ketterer, catedrático de la Universidad de Arizona y especialista en la materia, conclluye que en la colonia Anapra y otras zonas cercanas de ambos lados de la frontera existe fuerte contaminación de metales nocivos para la salud como el plomo.
El estudio, dijo, viene a confirmar lo que ya se sabía: que Asarco es responsable directa de la contaminación generada en esta zona y que los niveles de concentración de plomo, cadmio y zinc, entre otros metales peligrosos, son varias veces superiores a los aceptables tanto en Estados Unidos como en México.
Dijo que este 8 de febrero se analizarán en la ciudad de Austin, Texas, las pruebas contra la empresa Asarco, entre ellas una recomendación de un juez para evitar que reanude operaciones. Ese día acudirán diputados del Congreso de Chihuahua para manifestarse contra la reapertura de la empresa, junto con otras organizaciones.
Hace un año el juez decidió aceptar las demandas de la agrupación Ciudadanos Organizados para el Desarrollo Integral de las Comunidades, para pronunciarse públicamente contra la reapertura de esta planta, situación que no se había dado en todos los años en que Asarco contaminó, pues antes ningún funcionario o político había hecho algo.
Precisó que el asunto se llevó a la 11 Conferencia Legislativa Fronteriza, al Congreso del estado, a las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores, y a la misma Presidencia de la República.
Asimismo se convocó a una conferencia de legisladores de Nuevo México, Texas, y Chihuahua, a la que acudieron al menos 12 representantes de los dos países, quienes emitieron una resolución en la que piden a las autoridades ambientales de Estados Unidos no renovar la licencia de operación de Asarco.
Con el apoyo del senador Jeffrey Jones, así como de diputados locales y federales de todos los partidos, este documento será entregado por los participantes el 8 de febrero en Austin a los oficiales de la Agencia Estatal de Calidad del Medio Ambiente encargados de decidir sobre el asunto.
Han confirmado su presencia en Austin los senadores Jeffrey Jones, Eliot Shapleigh (Texas), John Bingamon y Mary Jane García (Nuevo México), la representante Andy Núñez, además el diputado federal Ramón Galindo Noriega, y los legisladores locales José Luis Canales de la Vega, Yolanda Morales, Juan José González, Jaime García Chávez, Rubén Aguilar Gil y el propio Gómez Ramírez.