Crean clínica de equinoterapia donde se demolió el edificio defectuoso del CRIQ
Querétaro: explotan particulares ruinas de centro de rehabilitación
Funcionarios ocultan información sobre la renta que la empresa paga al DIF por el terreno
Las terapias de media hora cuestan $150 pesos, sin descuento a personas de bajos recursos
Querétaro, Qro., 25 de enero. En el terreno donde se erigió el Centro de Rehabilitación Integral de Querétaro (CRIQ), magna obra del ex gobernador Ignacio Loyola Vera demolida por fallas estructurales, opera una empresa que ofrece a personas con problemas físicos y de conducta terapias con caballos, con el aval del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) estatal, con el que firmó un convenio para rentar el lugar, hoy convertido en un campo con escombros.
El gobernador Francisco Garrido Patrón, sucesor de Loyola Vera, anunció en abril de 2004 que demolería el CRIQ -en el cual se invirtieron 50 millones de pesos- por fallas de planeación y construcción. Ofreció que en su sitio edificaría una unidad deportiva para personas discapacitadas, que costaría alrededor de 14.1 millones de pesos. Pero el mandatario no especificó una fecha para iniciar esos trabajos.
A casi dos años de este anuncio, la administración estatal emanada del Partido Acción Nacional (PAN) concluyó la construcción de un nuevo CRIQ en un terreno que se ubica frente a la antigua instalación, con una inversión 76.7 millones de pesos.
El nuevo centro ya está en operación. Mientras, de la obra defectuosa que tuvo que ser demolida únicamente quedó un campo desierto y lleno de escombros, rodeado por una barda.
En lo que fueron las instalaciones del CRIQ hay una manta con un anuncio que ofrece equitación terapéutica: ''Horse-Learning'' (aprendizaje con caballos). El lugar aloja a varios corceles y a un remolque para transportar equinos, el cual tiene la leyenda Club Hípico San José.
Entrevistado vía telefónica, el administrador, Roberto Cantú Latapí, dijo que esta empresa está certificada por la organización estadunidense Equine Assisted Growth and Learning Association (EAGALA, por sus siglas en inglés), opera en las instalaciones del antiguo CRIQ gracias a ''un convenio especial que hemos trabajado con el DIF''. Sin embargo, se negó a dar detalles sobre dicho convenio con el argumento de que es información ''poco relevante''.
Sin embargo, otra fuente señaló que la empresa de equinoterapia renta al DIF estatal las instalaciones del antiguo CRIQ a un costo que ninguna de las partes quiso especificar. Interrogado al respecto en una charla informal, el oficial mayor de gobierno del estado, Luis Miguel Sánchez Canterbury, dijo que no tenía información y la paraestatal tampoco la brindó.
Roberto Cantú explicó que las terapias con caballos están dirigidas a niños que presentan dificultades de aprendizaje, falta de concentración y atención, problemas de conducta y físicos.
Las terapias son para niños que ya pueden sentarse y hasta de seis años de edad. Cantú aseguró que tienen un área de estimulación temprana para bebés de 12 meses en adelante. Cada sesión de media hora cuesta 150 pesos y no hay descuentos ni apoyo para personas de escasos recursos, pues se trata de una empresa particular, que recomienda a los pacientes tomar este tipo de terapias una vez por semana y al menos durante ocho sesiones para empezar a ver resultados.
Cantú Latapí dijo primero que el servicio de equinoterapia en las instalaciones del antiguo CRIQ sería ''permanente''; sin embargo, después reconoció que no sabe si los retirarán del lugar cuando autoridades de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas (SDUOP) empiecen a construir una unidad deportiva para personas discapacitadas. Sin embargo, el gobierno estatal no ha precisado cuándo comenzarán estas obras.
En su página electrónica, EAGALA dice ser una asociación ''no lucrativa'' creada para tratar problemas de conducta mediante la sicoterapia y la interacción con caballos.
La Secretaría de la Contraloría Estatal determinó hace un año que cinco ex funcionarios de la administración de Ignacio Loyola Vera, entre ellos el ex titular de la SDUOP, Alfonso Ramos Rocha, son responsables de la inadecuada planeación y construcción del CRIQ, por lo que fueron inhabilitados para ocupar cargos públicos y se les ordenó resarcir el daño patrimonial. Sin embargo, los acusados interpusieron un recurso de nulidad ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo, el proceso continúa y, legalmente, aún no hay culpables del fracaso de la obra.