El documental sobre Kennedy, "pura factura CIA": Castro
Militar cubano en retiro acusa a cineasta alemán de calumniarlo
La Habana, 23 de enero. El ex jefe de la Seguridad del Estado de Cuba, Fabián Escalante, acusó hoy al cineasta alemán Wilfried Huismann de calumniarlo "sin prueba alguna", al involucrarlo en un documental en el asesinato del presidente estadunidense John F. Kennedy.
El documental Cita con la muerte, de la televisora alemana ARD, se transmitió este mes en ese país en su versión original.
Después del estreno, Huismann dijo que entrevistó a Escalante en Cuba en mayo de 2005 y le preguntó por qué había viajado a Dallas el 22 de noviembre de 1963, el día que fue asesinado Kennedy. Según las declaraciones de Huismann, Escalante no quiso responder.
Escalante es un general del Ministerio del Interior en retiro y ha investigado el caso Kennedy. En un libro publicado en 2004 (1963: El complot) narró que el día del magnicidio él era jefe de una unidad de contrainteligencia y estaba en sus oficinas en una reunión con otros tres oficiales.
Este lunes Escalante dijo, en una entrevista con el semanario sindical Trabajadores, que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos, "amediante un testaferro de origen alemán, lanzó un documental de 90 minutos, a un costo de casi un millón de dólares, llamado Cita con la muerte, en el que me calumnia, sin prueba alguna, de haber supervisado en Dallas el asesinato de Kennedy".
"Es una teoría nueva", agregó Escalante. "No caben dudas de que los seis libros que tengo publicados hacen daño, particularmente el dedicado al asesinato de Kennedy, donde demuestro que el magnicidio fue el resultado de un complot que pretendía inculpar a Cuba, asesinar a Fidel (Castro) e invadir militarmente nuestro país".
Dos artículos del diario oficial Granma y un programa de televisión rechazaron en las últimas dos semanas la versión del documental de que Kennedy murió por una conspiración de origen cubano.
Al aparecer en la televisión este domingo, Castro tocó fugazmente el caso.
"Hay que ver bien quién es el tipejo ese y de dónde procede", dijo el mandatario en alusión a Huismann y luego vinculó la aparición del filme con la política de Estados Unidos hacia Cuba.
"Lo que lo delata es el momento", añadió Castro, en referencia al cineasta. "A él y a los que le ordenaron y pagaron por hacer eso".
El presidente cubano dijo que el documental es "pura factura CIA".
Escalante concluyó en su libro que los autores intelectuales y materiales del magnicidio "están aún por descubrir" y que "probablemente los primeros se encuentran entre los propios círculos del poder estadunidense, opuestos a las políticas de Kennedy; los segundos, dentro del mecanismo cubano-americano de la CIA y la mafia, en tanto ellos eran los que contaban con las motivaciones, los medios y los hombres entrenados para tales fines".
El autor dijo a Trabajadores que, después de jubilarse en 1996, no ha hecho "nada que pueda afectar los intereses de Estados Unidos ni de la CIA", pero que "en todos estos años han mantenido un seguimiento sobre mi persona".
"Lo que he escrito los ha afectado, cosa que me satisface extraordinariamente", añadió Escalante, ahora de 65 años. Agregó que causarle daño a la CIA es "el mayor de todos" sus éxitos.