Inaugura exposición-subasta en la galería Photo Bistro en beneficio de niños con sida
Me gusta el cuerpo de la mujer; es más expresivo que el masculino: Pedrero
Confluyen las culturas mexicana y canadiense en el trabajo del fotógrafo mexicano
Siguiendo con la costumbre de realizar exposiciones trimestrales, el restaurante-galería Photo Bistro de la colonia Condesa, que dirige el fotógrafo francés Christian Besson, presenta el trabajo de Joaquín Pedrero. Nacido en el Distrito Federal en 1946, este artista de la lente vive en Vancouver, Canadá, desde hace 20 años. Su llegada a la fotografía fue, literalmente, de manera "accidental". Allá por el año de 1968 Pedrero estaba por finalizar sus estudios de medicina en la Universidad Nacional Autónoma de México cuando se suspendieron las clases por una huelga estudiantil. Fue entonces, durante ese trance, cuando su hermano le propone ir a visitar a unos amigos en San Francisco, California. Tras un mes de estancia en esa ciudad, su mamá, que era aficionada al arte de la lente, le pide que le compre una cámara fotográfica para retomar su hobby que había abandonado desde hacía algún tiempo.
De regreso a México, Pedrero sufre un accidente automovilístico en una carretera al sur de Los Angeles que le obliga a permanecer en Tucson, Arizona, hasta recuperarse. Estando convaleciente, recuerda la cámara que le había comprado a su madre y comienza a fotografiar los paisajes de esa región y, en particular, los cactus de los desiertos. A partir de ahí queda totalmente cautivado por ese arte y decide escuchar su voz interior que le arrastraba hacia la captación de imágenes, abandonando así la medicina.
Interesado en la fotografía de gran formato, en 1972 se traslada a estudiar a Nueva York y comienza a trabajar como fotógrafo comercial y publicitario donde adquiere reconocimiento. Pero, hace 10 años, una de sus hermanas pierde la vida a raíz de una sobredosis de droga y él se sume en un profundo dolor. Una noche, buscando resolver los conflictos que este dramático suceso familiar le había ocasionado, se encierra en su estudio fotográfico. De ahí nace Cassandra -expuesta en Photo Bistro- su primera fotografía artística en la que exterioriza, a través de un desnudo femenino y elementos simbólicos que representa el dolor, todo su universo emocional. A partir de ese momento, la fotografía artística convive paralelacon su trabajo comercial. Esta como modus vivendi, la otra como alimento de su alma.
La fotografía artística de Pedrero es tremendamente poética. Utiliza gran formato, blanco y negro, y fotografía con dos cámaras y un solo negativo. El resultado son imágenes sobrexpuestas donde el desnudo femenino es el centro de su inspiración. "Me gusta el cuerpo de la mujer, en él encuentro muchas metáforas y es mucho más expresivo que el desnudo masculino. Los hombres están más preocupados en cómo se ven e inhiben su expresividad corporal. Me crea mucho conflicto el ego masculino".
El concepto de su fotografía es responder a su voz interior, y desarrollar una expresión libre tanto en su mensaje como en su interpretación. Expone infinidad de elementos, en donde confluyen dos influencias culturales, la mexicana y la canadiense. En ellas pueden aparecer caracolas prehispánicas como cuernos de alce. Todas sus fotografías tienen un título, en el cual el artista sugiere al espectador su intención pero, a su vez, deja a la percepción un amplio margen imaginativo.
En su obra hay nostalgia de su México lejano. Transmite una gran admiración y orgullo por la cultura mexicana, y crea nexos transfronterizos en donde lo importante es la imagen como evasión espiritual.
La exposición que ahora presenta en Photo Bistro está compuesta por diecisiete imágenes de 1.10 x 80 centímetros y serán subastadas antes del 30 de marzo en beneficio de la Fundación Nicasi, la cual atiende a niños de la calle con sida.
A partir de esta exposición, las subastas en este restaurante no se realizarán a través de un acto en concreto, sino que serán por medio de una libreta, en donde durante estos dos meses y medio, tanto comensales como visitantes, podrán pujar. En dicha libreta, aparece una pequeña reproducción de cada foto expuesta y aquellos interesados anotan la cantidad de dinero que están dispuestos a ofrecer por la adquisición de cada imagen. El 30 de marzo, quien haya anotado la mayor cantidad, será el que adquiera la foto. Cada ejemplar arranca con una cantidad de mil 200 pesos.
Photo Bistro: Citlaltépetl 23, Local F. Col. Hipódromo Condesa. Teléfono: 52 865945.