Acapara la atención en el Zócalo la condena a los feminicidios en Ciudad Juárez
Más de 100 artistas actuaron durante 12 horas contra violencia de género
Es muy importante trabajar por una sociedad sin discriminación por razones de sexo: Serrat
Golpe a golpe, verso a verso, canción tras canción, testimonio tras testimonio, ayer, durante más de 12 horas, más de 100 artistas mexicanos y españoles ofrecieron una muestra de lo mejor de su oficio, entre poesía, canto y música, contra la violencia en todas sus formas, en un concierto organizado por la Plataforma Mujeres Artistas contra la Violencia de Género, de España, y el Gobierno del Distrito Federal.
Joan Manuel Serrat, quien fue recibido con carteles donde se leía "Eres único. Ruego a Dios te dé salud. Rompes corazones (incluyendo el mío). Amo la poesía, tu voz, tu rostro y tu tiempo. Tus poemas son los más hermosos que conozco. Eres el único poeta que existe en el planeta. Te amo", dijo que estaba ahí porque está contra todo tipo de violencia.
"No es sólo por las muertas de (Ciudad) Juárez, ni por la violencia de género, sino contra todo tipo de violencia. A eso me opongo yo. Si quieren saber qué es para mí una mujer, escuchen mi próximo disco, que saldrá en marzo o abril, pero recomiendo que se busquen un amigo que hable catalán".
La Universidad Autónoma de Puebla le otorgará un reconocimiento honoris causa mañana. "Espero que no se arrepientan de aquí al lunes." Y se despidió para cantar dos temas, uno dedicado a la belleza de la mujer, de ella, "quien es como una muñeca rusa". El público lo recibió con un gran aplauso, cálido.
Se protegió del sol con una gorra negra. A las 13:21, sin preámbulo, de su guitarra surgieron los acordes de un tema emblemático: Cantares. Machado en el aire, en el Zócalo. "Todo pasa y todo queda / pero lo nuestro es pasar / pasar haciendo camino / camino sobre la mar..."
Fue todo. Se despidió a las 13:40, entre gritos de "¡otra, otra!". Pero no hubo más. A un lado del escenario, expresó: "Espero que los que estén aquí lo hagan de corazón. Es muy importante trabajar por una sociedad paritaria, donde hombres y mujeres, todo ser humano, no sea discriminado por razones de sexo".
Le precedió Eugenia León, entregada en cuerpo y alma con Yo vengo a ofrecer mi corazón. "No más feminicidios", se leía en dos mantas colocadas en el centro de los dos escenarios, parte de una iconología para reforzar el objetivo de la plataforma en su visita a México. En siete días han exigido conciencia sobre lo que pasa en la ciudad fronteriza. Y se encontraron con el caso de Lydia Cacho.
La periodista Cacho dijo en entrevista que fue emocionante oír Cantares. "La presencia de Serrat para nosotras es bien significativa. El hecho de que haya aquí cantantes tan diversos quiere decir que todo mundo tiene derecho a la voz, a la palabra y el canto."
Tatiana cantó su Chicas de hoy, "tururú-tururú" rapeado. Se sumó a la causa. Lo mismo la periodista Carmen Aristegui, quien se pronunció por crear una fuerza que haga contrapeso al poder que no ha hecho nada por las muertas de Juárez. El actor Rogelio Guerra, quien leyó dos poemas, aseguró que él habría ido aunque no lo hubieran invitado.
Jesusa Rodríguez leyó un texto sobre la violencia de género y formuló una pregunta: "¿Quién generó la violencia?" Las malas palabras sufren violencia de género. Marina Rossell subió para interpretar Tócame, que la vida se va. Rosa Pérez, titular del Instituto de la Mujer de España, leyó un mensaje de apoyo a la plataforma. "No venimos a pedir perdón, sino a exigir nuestros derechos."
La serie de expresiones para exigir justicia, claridad, alto a los feminicidios, se sucedió en voz de Mónica Randall, del grupo de rock Morse. "Cuidado, el machismo mata", se leía en pegotes. Ana Colchero se pronunció enérgica contra lo que pasa en Juárez. La bailarina Alma Sanz ejecutó sus danzas gráciles y sensuales. Karenca y su rumba, para bailar y protestar, pero con alegría. Angel Petisme cantó "desde el corazón de México, el laberinto de la soledad".
Victoria Lerma lanzó a los cuatro vientos: "¡Estamos aquí para callar a esos cabrones!", en relación con quienes agreden. Cantó Lárgate. El grupo Byte, puro pop para echar relajo. Tam Tam Go y su Pasará. En las primeras filas, unas integrantes de plataforma se dan una manita de gato. La belleza no tiene horarios. Caco Senante subió de tono el concierto. Ha alternado con Joaquín Sabina y Rubén Blades, por ejemplo. Cantó a su manera Vámonos, de José Alfredo Jiménez, y entonó Mañana. "Sería inmensamente infeliz si no pudiera asistir a un acto como este", se sinceró.
Así siguió el concierto. Hacia las 8 de la noche faltaban unos 40. Mediante fotografías se recordaron los casos de Digna Ochoa, de Pavel González y otros. Muchos puños en alto a lo largo de la noche, que fue de blues (con una intervención sobresaliente de Betsy Pecanins), rock, poesía, performance, pop, rumba; de arte contra la violencia.
El 24 de este mes, la plataforma estará en Ciudad Juárez, donde artistas españolas ofrecerán el concierto Ellas dan la nota.