El priísta Espinosa Castañeda tuvo que rendir protesta como edil en sindicato del STPRM
Cierran el centro de Atitalaquia, Hidalgo
Atitalaquia, Hgo., 16 de enero. Los problemas poselectorales continuaron en este municipio, donde más de un millar de habitantes armados con palos, hachas y machetes se concentraron resueltos a impedir el cambio de poderes municipales y a defender al que a su juicio fue el candidato ganador de las elecciones del pasado 13 de noviembre, el panista David Reyes Santamaría, para lo cual cerraron los accesos de la plaza principal.
En el auditorio del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), resguardado por más de 500 granaderos, rindió protesta "legal" el abanderado del PRI, Claudio Espinosa Castañeda, quien después de dos intentos fallidos anteriores logró llegar a la alcaldía. En el acto estuvo presente el director de Gobernación para la región de Tula, Jorge Candelaria Cerón.
En Atitalaquia, ubicado al sur de Hidalgo y colindante con el estado de México se suscitaron las protestas más significativas de esta jornada de cambio de poderes en los 84 ayuntamientos de la entidad, a pesar de que la víspera se anticipaban disturbios en Metztitlán, San Bartolo Tutotepec, San Agustín Tlaxiaca, Tepeapulco, Ixmiquilpan y Tlaxcoapan.
A una distancia prudente de la presidencia municipal se apostaron unos 200 granaderos, pero al menos hasta hoy los atitalaquenses no cumplieron sus amenazas de quemar carros, cerrar carreteras, paralizar actividades en la refinería Miguel Hidalgo de Petróleos Mexicanos (Pemex) e incendiar la sede del ayuntamiento.
A lo más que llegaron fue a cerrar todos los accesos a la plaza principal, para lo que utilizaron los camiones del departamento de limpia del municipio, que durante este trienio gobernó el Partido Acción Nacional. Eso sí, mantuvieron su beligerancia verbal y no soltaban sus palos, hachas y machetes.
Al mediodía arribó Candelaria Cerón, quien intentó persuadir a los inconformes para que desalojaran la presidencia, que mantienen tomada desde el jueves pasado, pero la respuesta fue negativa.
A menos de un kilómetro de distancia, en la casa del priísta Claudio Espinosa había nerviosismo, y a la una de la tarde partió con el director de Gobernación para la región de Tula, al auditorio propiedad del STPRM, donde rindió protesta como nuevo edil de Atitalaquia.
Dicho acto fue rechazado por la gente que se congregó en la alcaldía, al considerar que se cometió un fraude, pues en un principio el Instituto Estatal Electoral (IEE) declaró ganador al panista David Reyes Santamaría, pero el 6 de enero el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), por una demanda del PRI, revisó el caso y revocó el triunfo del PAN para darle la victoria al tricolor.
Eso enojó a los panistas, a quienes se han sumado perredistas, convergencistas, priístas y militantes de Alternativa Social Democrática y Campesina, que consideraron "una burla" la modificación de los resultados.
David Reyes denunció que el gobierno y los priístas les han ofrecido "cargos en la administración municipal y hasta autos", pero dijo que aquí está en juego la voluntad de la ciudadanía, por lo que advirtió que la movilización ciudadana continuará y no se permitirá a Claudio Espinosa que ingrese a la presidencia municipal, ocupada por los inconformes.
De acuerdo con autoridades policiacas, el programa de renovación de poderes en los 83 ayuntamientos restantes se llevó a cambio sin contratiempos, y en el operativo de vigilancia participaron mil agentes.