CIUDAD PERDIDA
Desempeño de funcionarios, termómetro electoral
Delegaciones, patrimonio de tribus
Herencias y legados
MAS QUE la búsqueda de equilibrios entre las tribus, por medio del sistema de cuotas, el PRD debería tener a estas alturas del proceso de selección de sus candidatos una medición clara del desempeño de los miembros de las corrientes en los cargos que han desempeñado, y así podrían, con alguna facilidad, desprenderse de muchos aspirantes a los cargos que están en juego.
UN EJEMPLO que podría atenderse como tal es el de la delegación Cuauhtémoc. En esa demarcación, mientras florecen los bares y los edificios condominales, los parques y los jardines se han convertido, casi sin remedio, en zonas de tierra suelta.
BASTA DAR una vuelta por la calle Amsterdam, considerada como una de las más bellas de la ciudad, para caer en cuenta del descuido y pésimo manejo que las autoridades delegacionales han tenido en la zona.
BANQUETAS ROTAS, prados muertos, adoquines disparejos, en fin, un paisaje desolador para cualquiera que piense que en esta delegación pudiera gobernar, por tercera vez consecutiva, otro miembro de la Corriente de Izquierda Democrática, que dirige René Bejarano. Pero la clientela hace la votación -dicen- y la CID exige, como cuota, imponer a otro de sus integrantes.
Y NO se trata nada más de la colonia Hipódromo Condesa, donde se halla la calle Amsterdam. Los números que resultan del gobierno de la CID en la Cuauhtémoc hablan por sí mismos. Es una de las delegaciones con el mayor índice de robos de autos, el ambulantaje se ha disparado, la cantidad de antros y la prostitución callejera dominan sus noches.
NO OBSTANTE, la CID pretende quedarse con la delegación. Se podrá decir que al Parque México se le cambió el piso de sus andadores, y es cierto, sólo que en ese trabajo, único realizado en el parque, las autoridades tardaron cerca de seis meses.
TAMBIEN SE podrá decir que hay batidas en contra de los vendedores de artículos piratas y la prostitución, pero todo eso es absolutamente ineficiente, ya que por cada cabeza que les cortan, sale una nueva y opera con toda tranquilidad.
PERO NO es el único caso. Las delegaciones se han convertido en territorios propiedad de las tribus o de algunos partidos que las consideran como su patrimonio. Benito Juárez y Miguel Hidalgo pertenecen, hasta ahora, al PAN y los resultados de los gobiernos azules no parecen ser el aval para que ese partido siga en el poder.
IZTAPALAPA, COMO todos saben, es una herencia que Nueva Izquierda, o mejor dicho René Arce, le va legando a sus fieles. No importa que tan buena o mala hubiera sido la gestión de gobierno, simplemente les pertenece y no hay mayor discusión.
EN ESAS anda Coyoacán. A la gente de esa delegación se le impuso al nunca bien ponderado Miguel Bortolini y ahora se le quiere volver a imponer a otro miembro de la CID, como si no hubiera sido suficiente con el amo y señor de "la nutritiva" leche Betty.
EN FIN, el PRD ha dividido la capital en territorios que llevan nombre y apellido, en los que la eficiencia del gobierno es una cuestión secundaria y eso podría llevarlos a sufrir descalabros inesperados en la próxima elección.