El mandatario electo boliviano agradece la ayuda de París a los "pueblos indígenas"
Ofrece Jacques Chirac a Evo Morales el apoyo político y económico de Francia
El presidente francés le expresó "admiración por la revolución democrática" que encabeza
París, 7 de enero. El presidente francés, Jacques Chirac, ofreció hoy al presidente electo boliviano Evo Morales el apoyo económico y político de Francia, sobre todo ante la Unión Europea, y le expresó su "admiración por la revolución democrática" que se está llevando a cabo en Bolivia.
"Estoy muy contento de ver al primer representante de la nación indígena tomar la responsabilidad de presidente de Bolivia", le dijo Chirac a Morales en el Palacio del Elíseo, donde lo recibió poco antes del mediodía con honores de la Guardia Republicana francesa, en el último acto oficial de la gira europea del boliviano.
El dirigente aymara respondió que ya no se siente solo, porque "percibo que se me apoya a escala internacional. Estoy encantado de esta relación privilegiada con Europa. Somos pueblos cercanos, somos pueblos hermanos".
Morales agradeció a Chirac su ayuda en favor "de los pueblos indígenas" y su profundo respeto a su triunfo electoral.
El mandatario francés, quien pidió estar representado personalmente por un miembro del gobierno durante la toma de posesión de Morales, el próximo 22 de enero, insistió en las preocupaciones de Francia por las inversiones extranjeras en el país andino, al repetirse esa inquietud a su paso por el viejo continente.
"Deseo que haya entre Bolivia y Francia una relación fuerte y fraternal. Puede usted contar con verdadera cooperación de Francia", añadió Chirac, cooperación que se traducirá en los dominios de la salud, la ayuda social y la capacidad administrativa en el plano bilateral y europeo.
La cooperación se apoyará en acuerdos de desendeudamiento y desarrollo, proyectos en que figurará un contrato sobre todo en materia de salud (epidemiología) por un monto de 20 millones de euros (unos 24 millones de dólares).
De acuerdo con fuentes oficiales francesas, Chirac expresó que "es importante velar por los inversores extranjeros en el contexto de la seguridad jurídica", una de las cuestiones en los intereses comerciales de las empresas francesas en Bolivia, en concreto el gas, ante los anuncios del visitante de nacionalizar los recursos energéticos.
Morales expresó el deseo de que los inversores extranjeros puedan continuar invirtiendo en Bolivia, y evocó la situación de la compañía petrolera francesa Total, que participa desde 1995 junto con la brasileña Petrobrás en la explotación de dos yacimientos de gas en su país.
El líder boliviano dijo que deseaba que Total siga invirtiendo en Bolivia. "Necesitamos inversores para construir carreteras e infraestructuras", y reiteró que la hoja de coca no es el narcotráfico, otro de los temas polémicos con Occidente.
Otra de las empresas francesas en Bolivia es la de saneamiento Suez, cuya filial Aguas de Illimani está siendo auditada por su gestión entre 1997 y 2005, tras fuertes protestas de la población contra las altas tarifas que la compañía cobraba durante el gobierno de Carlos Mesa.
"Me voy muy contento y agradecido, sobre todo porque el presidente Chirac me ha expresado su apoyo incondicional y solidaridad en la solución de los problemas sociales de los pobres, de los pueblos indígenas de mi país", declaró Morales al salir del palacio de goobierno luego de su entrevista con el mandatario francés.
Añadió que "el presidente Chirac me ha expresado toda su admiración por los cambios profundos que nos hemos planteado, una revolución democrática y cultural desde Bolivia", y añadió que se iba muy contento por los apoyos para temas económicos, financieros, bilaterales, y ante la Unión Europea.
"Eso alienta bastante. Me he dado cuenta que no estoy solo, que tengo apoyo internacional", dijo con emoción. "En el momento de despedirme quiero decirles que el encuentro con algunos gobiernos de Europa es el encuentro de dos continentes, de dos pueblos, de dos culturas para defender la vida, para salvar a la humanidad".
Los periodistas franceses presentes destacaron que era excepcional ver a un jefe de Estado extranjero llegar sin corbata a una entrevista con Chirac. Morales vestía una sencilla chaqueta de cuero negro y en efecto no llevaba corbata.
Mientras Morales salía esta misma tarde rumbo a China, con los deseos de éxito de Chirac, en La Paz las fuerzas armadas de Bolivia demandaron al próximo gobierno "potenciamiento bélico y modernización", en un acto de graduación al que asistió el presidente saliente Eduardo Rodríguez.
El comandante en jefe de las fuerzas armadas, contralmirante Marco Antonio Justiniano, anunció que presentará al presidente Evo Morales, después de su investidura el 22 de enero, un ambicioso plan de restructuración de las armas bolivianas.
Lo anterior, en el contexto de relaciones que se vislumbran "promisorias", a decir de analistas políticos.