La cantante participará en el concierto por 60 años del holocausto, en Bellas Artes
Deplora Ute Lemper el papel de la Iglesia asociado a las guerras
El extremismo del cristiano Bush es tan terrible como el genocidio en Africa, dice a La Jornada
Compartirá escenario con Jessye Norman, Philip Glass, Laurie Anderson y Shlomo Mintz
Ute Lemper en entrevista con La Jornada: ''Es muy triste ver cómo la religión sigue siendo la causa de tantas muertes, de tantas guerras. Desde que la Iglesia tomó el poder o se asoció con los poderosos para sus propósitos económicos y políticos, ha causado muchas guerras".
Agrega: ''Vemos hoy día a George W. Bush, un cristiano extremista, haciendo guerras contra extremistas islámicos. Eso es tan terrible como el genocidio en Africa. Tan terrible como la pobreza en el mundo".
La cantante alemana se prepara en Nueva York, desde donde conversa vía telefónica, para viajar a México de nuevo. Tiene una razón muy poderosa: ''Soy una parte mínima de un gran proyecto. No es un concierto de Ute Lemper ni soy la única, pero lo hago con toda mi alma y entrega para el concierto en memoria del holocausto, donde participarán grandes artistas. Yo participaré sólo con tres canciones, una en yiddish, otra en hebreo y otra en inglés. Este concierto se iba a realizar en 2005, cuando se conmemoró el 60 aniversario del holocausto, pero tuve a mi bebé el primero de noviembre. Amablemente, Orly Beigel, la ideadora de este concierto, pospuso la fecha para inicios de 2006 y ya estamos listos todos".
Intensa duda histórica
-¿Qué significado cobra la experiencia de ese holocausto 60 años después?
-Para mí como alemana es tema arduo, ambiguo, tortuoso. La memoria del holocausto es un componente muy doloroso de la conciencia alemana. Es una zona de la conciencia llena de preguntas sin responder y culpa, dolor, pena. Una intensa duda histórica acerca de cómo eso pudo haber sucedido, y todas esas preguntas afectan el alma y el carácter de los alemanes.
''Cuando era joven no podía comprender ese flujo de furia que corría de generación en generación: de mis abuelos a mis padres a mí y con el tiempo he comprendido que todas esas preguntas jamás recibirán respuesta. Quizá el dolor, el sufrimiento de algunas generaciones anteriores desaparezca sólo con ellos, porque en su memoria está el haber sido bombardeados, torturados, asesinados sus familiares más cercanos.
''Empecé a sentir una suerte de alivio en cuanto pude hablar del tema en público, pero no como un pedazo de la historia, sino como un cúmulo de vidas y destinos que estuvieron involucrados en el holocausto. A hora muy temprana en mi vida supe que mi misión primaria consistía en revivir todo aquel repertorio de canciones realizadas por compositores judíos que fueron perseguidos y aniquilados, y hablar de esas vidas como una alemana de una generación distinta a la del holocausto.''
-¿Cuáles son las respuestas que puede usted aportar para las generaciones más recientes?
-Por lo pronto hablar de esas vidas de músicos. Muchos muchachos no tienen el mismo conocimiento que las personas de mi generación acerca de por ejemplo La ópera de tres centavos, escrita por Kurt Weil y Bertolt Brecht, o de toda aquella música que prohibieron los nazis. Tampoco saben de la emigración forzada, de las torturas. Para muchos jóvenes puede tratarse de historia muy antigua a pesar de que sólo han pasado 60 años. A muchos jóvenes les parece algo tan remoto como la era de Napoleón. Cuando en realidad esto ocurrió apenas ayer.
-¿Estaría de acuerdo en que los riesgos de nuevos holocaustos perviven en manos de personas como George W. Bush, que hace guerras para hacer negocios?
-Creo que el término holocausto pertenece a lo que ocurrió hace 60 años, a ese crimen organizado, pensado, planeado fríamente por los alemanes. Se trata de crimen organizado y a sangre fría. Por otra parte, la situación del Medio Oriente hoy día es muy sangrienta, llena de odio e intolerancia. Respecto de Bush, por supuesto que su guerra en Irak no tiene sentido, pero yo reservaría la palabra holocausto sólo para aquel crimen terrible contra el pueblo judío a manos de los nazis. El crimen de hoy es distinto, muy complejo.
-Pero es también una forma de crimen organizado, ¿no es así?
-Definitivamente, es crimen organizado. La manera de imperialismo con la que los nazis intentaron conquistar el mundo de modo irracional y la forma de organizar hoy día las guerras para crear el caos mediante acciones militares, son similares. Es claro que la guerra de Irak inició sin motivo, salvo las razones imperialistas y los intereses económicos y políticos de los republicanos alrededor de Bush. Lo que han creado es el caos y el crimen es caos. Pero yo insistiría que el término holocausto sólo pertenece al genocidio contra los judíos a manos de los nazis. No puedo comparar eso con la situación bélica actual, son distintas porque siento especial compasión por este crimen histórico contra el pueblo judío.
Enfrentamiento entre extremistas
-¿Cómo observa el mundo de 60 años después del holocausto?
-Es muy triste ver cómo la religión sigue siendo la causa de tantas muertes, de tantas guerras, desde que la Iglesia ha tomado el poder o se ha asociado con el poder para cumplir propósitos políticos y económicos y eso ha causado guerras. Bush es un cristiano extremista, enfrentado a extremistas islámicos. Eso es terrible. El poder económico y algunos medios de comunicación alentando la guerra en Irak. Es terrible ver eso. Tan terrible como el genocidio en Africa o como la pobreza.
La magna gala Nunca más. Un concierto por la vida se realizará el 17 de enero en el Palacio de Bellas Artes, para conmemorar el 60 aniversario del fin del Holocausto. Participarán seis de las más importantes figuras del arte sonoro mundial, provenientes de diferentes especialidades y géneros: la soprano Jessye Norman, el compositor Philip Glass, la compositora e instrumentista Laurie Anderson, la cantante Ute Lemper, el violinista Shlomo Mintz y el director Elli Jaffe.