Investigadores demuestran que esa especie no se extinguió

Busca el IE la conservación del murciélago cabeza plana

Luego de demostrar la existencia en tres entidades del norte del país del murciélago cabeza plana, que desde hace 50 años se creía extinto y del que el año pasado se hallaron siete ejemplares, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) puso en marcha un programa de recuperación de esa especie única en el mundo, y solicitará a las autoridades que se declare su hábitat como área protegida para su conservación.

Este proyecto del Instituto de Ecología (IE) puso en marcha también una nueva línea de trabajo sobre nuevas especies endémicas, como el murciélago platanero, que únicamente vive en la costa oeste de la República.

De acuerdo con la institución universitaria, aunque en los años 90 el murciélago cabeza plana fue declarado especie extinta en el país, el IE demostró su existencia y puso en marcha un programa de recuperación y conservación.

En el triángulo de los estados de Nuevo León, Coahuila y Zacatecas se encuentra el único lugar el mundo donde habita este especimen (Myotis planiceps), uno de los más pequeños del orbe, con un peso de entre dos y tres gramos y que en los años 50 fue descrito sólo por cuatro individuos y desde entonces hasta el año pasado se habían dejado de tener noticias de él, por lo que en 1996 la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza lo declaró perdido.

Sin embargo, el año pasado un equipo del Programa para la Conservación de los Murciélagos de México (PCMM), encabezado por el IE, realizó investigaciones de campo en las localidades donde se tenía noticia de que el animal había morado, y el resultado fue la captura de siete ejemplares.

El científico universitario del IE que encabeza el PCMM, Rodrigo Medellín, precisó que la máxima casa de estudios trabaja en la identificación del hábitat crítico de esta especie y que en cuanto concluyan sus investigaciones solicitarán a las autoridades competentes que declaren áreas protegidas para la conservación del murciélago.

De acuerdo con sus investigaciones, este animal vive en los bosques boreales que albergan abetos, pinos y encinos, a una altura de entre dos mil 500 y tres mil 400 metros sobre el nivel del mar, en el extremo sur de la Sierra Madre Oriental.

Sin embargo, afirmó, el murciélago cabeza plana difiere de otras variedades asociadas a esas superficies -que van desde el centro de México hacia el Norte, a través de Estados Unidos y Canadá- porque no emigra.

Medellín aclaró que el verano pasado el equipo del IE les colocó radios diminutos para encontrar sus refugios y lo que pudieron constatar es que este animal volador se guarece en las yucas -árboles abundantes en el norte de México-, cuyas hojas secas se doblan contra el tronco y dejan huecos que sirven de morada.

"Se colocaron redes y en la noche logramos capturar más de un centenar de hembras preñadas o lactando", dijo. Como parte de su investigación, tratarán de buscar los sitios donde esta especie se refugia en verano y en invierno, con el propósito de extender las áreas de protección.

En cuanto al murciélago platanero, que vive en las costas comprendidas entre Jalisco y Guerrero, aseguró que su número disminuyó porque la zona del Pacífico ha sido desarrollada para turismo, lo que incide en su hábitat, que requiere del bosque seco, uno de los ecosistemas más amenazados y más ricos en especies endémicas.

Según las leyes mexicanas, este animal está en peligro de extinción. El murciélago platanero tiene el hocico más largo que ningún otro mamífero terrestre en el mundo en relación con su tamaño, el cual le sirve para alimentarse de ciertas plantas, pero aún se desconoce cuáles; sin embargo, se prevé que se trata de flores profundas que puede polinizar.

Gabriel León Zaragoza