Expertos de la UNAM realizan la investigación
Genes y medio influyen en desarrollo de enfermedades
Las cuestiones hereditarias dan cierto tipo de respuestas, de acuerdo con el ambiente, explica Patricia Ostrosky
Científicos universitarios estudian la susceptibilidad de los seres humanos para desarrollar enfermedades y su vinculación con la carga genética, lo que explica por qué si dos sujetos se exponen a los mismos agentes, uno pueda presentar problemas cardiacos y el otro diabetes, señaló Patricia Ostrosky, adscrita al Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Agregó que las cuestiones hereditarias dan cierto tipo de respuestas, de acuerdo con el medio ambiente; por ello, sólo entre 5 y 10 por ciento de los cánceres son transmitidos, ya que entre 90 y 95 por ciento se deben a interacciones de susceptibilidad con el entorno.
El alcoholismo, un ejemplo
Otro ejemplo es el alcohol: "Se sabe que hay genes de alcoholismo, pero si la persona nace en una población donde nadie bebe licor, aunque tenga la propensión no va a desarrollar la enfermedad, mientras si un individuo, a pesar de no tener antecedentes genéticos, tiene muchos problemas emocionales, puede convertirse en bebedora".
Estas unidades genéticas, explicó la académica, son secuencias ordenadas de nucleótidos que contienen el código específico para producir una proteína. Aunque todos los individuos tienen los mismos nucleótidos, en algunos se han encontrado hasta 10 millones de cambios en uno de cada tres nucleótidos, que se conocen como polimorfismos, causantes de la susceptibilidad individual.
Ellos afectan la forma en que se metabolizan las sustancias y, por lo tanto, si son activadas o rápidamente excretadas; determinan cómo un individuo responde ante una sustancia a la que está expuesto, sea un medicamento o un tóxico en el ambiente y, por tanto, si es efectivo y de utilidad clínica o genera productos nocivos, retenidos por el organismo por largos periodos y con efectos adversos.
Descubren nuevos métodos
La investigadora añadió que gracias a los avances de la ciencia y la tecnología, día a día se descubren nuevos métodos para manipular los genes con el fin de disminuir o aumentar la respuesta individual a un fármaco o un tóxico según se requiera. En el futuro, se podrá detectar con facilidad qué individuos responderán a un tratamiento.
Consideró que, así, la medicina actual se encuentra en una situación compleja, por lo que se necesita establecer comités de ética que encuentren respuestas a las interrogantes sobre si se pueden o no manipular las estructuras fundamentales, y hasta dónde es válido hacerlo, y quién determina que se vale y qué no.