Es consecuencia de la confianza creciente en la organización de los comicios, justifica el IFE
Disminuye el interés de los observadores electorales; registran más de 50 proyectos
Las campañas electorales comenzarán formalmente en 23 días, pero ya se han registrado poco más de 50 proyectos para la observación de los comicios federales de 2006, mismos que podrán disponer del apoyo financiero de 40 millones que conforma el fondo creado por el gobierno mexicano y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Será a mediados de enero cuando el comité técnico de evaluación creado para revisar los alcances de cada una de las propuestas resuelva la viabilidad de las mismas y apruebe el monto del financiamiento en cada caso.
Sin embargo, algunas de las organizaciones ya han comenzado a desarrollar sus programas de observación debido a que, por primera vez en los cinco ejercicios que ha habido al respecto -de 1994 a la fecha-, el periodo de observación abarca la posibilidad de que se realicen evaluaciones de los procesos internos de selección de cada uno de los partidos políticos. Tal es el caso del Movimiento por la Certidumbre, que ha entregado una primera valoración sobre este periodo.
En las proyecciones del Instituto Federal Electoral (IFE) y del PNUD destaca la necesidad de que exista una modificación cualitativa en el esquema de observación electoral para el 2006 y se oriente fundamentalmente a los nuevos problemas de la democracia mexicana: financiamiento de los partidos políticos; acceso a los medios de comunicación; compra y coacción del voto; conteos rápidos y encuestas de salida, entre otros.
Instaurado el programa por primera vez en 1994, en medio del agitado proceso electoral de aquel año -provocado por el alzamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional y el asesinato del candidato priísta a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio-, la presencia de observadores en México ha ido en descenso: de 81 mil 620 participantes agrupados en 251 proyectos que se registraron en 1994, pasó a 38 mil 433 inscritos en 251 grupos para el año 2000. La observación en las elecciones intermedias -que generan menor interés nacional e internacional- es aún menor: 24 mil 391 en 143 proyectos en 1997, y 12 mil 728 en 157 programas para el 2003.
Dentro del organismo electoral se explica este fenómeno como una consecuencia de la confianza creciente que existe en la organización electoral en México, lo que ha reducido sensiblemente el interés por la observación.
En ese periodo México ha participado en decenas de misiones de observación electoral y ha ofrecido asesoría para la organización de comicios en países en conflicto.
Los cambios en la observación durante este periodo han sido importantes. Si en 1994 aún se centraba en la vigilancia de la jornada electoral en previsión de prácticas fraudulentas, para los comicios de 1997 y 2000 se registró una combinación de intereses en los grupos de observadores: algunos se enfocaron aún en la jornada electoral, pero otros se orientaron a las campañas; la administración electoral; los topes de gastos de campaña; la compra y coacción del voto; la justicia electoral, y el uso indebido de recursos públicos.
Para el actual proceso electoral, el IFE prevé nuevas orientaciones en la observación: "a diferencia de las anteriores experiencias, se ha generado una especie de red de organismos civiles cuyo interés está en observar la calidad de la elección".
De acuerdo con la regulación establecida para este proceso, ninguna de las organizaciones podrá obtener más de 3 millones de pesos como apoyo a su programa de observación electoral. En principio, el periodo de presentación de propuestas estuvo abierto entre el 29 de noviembre y el 16 de diciembre, tras lo cual se abrirá un periodo en el que el comité técnico de evaluación revisará las propuestas y hará pública su resolución el 16 de enero.
Entre los requisitos a cumplir por cada organización destaca delimitar el periodo de observación, las actividades que serán observadas, las técnicas que utilizarán para tal efecto y la demarcación geográfica que abarcarán.
Para el 20 de enero -un día después del arranque formal de las campañas-, las organizaciones que hayan sido avaladas por el comité recibirán una primera partida equivalente a 30 por ciento del apoyo total que habrán de recibir durante todo el proceso. Para el 31 de marzo, las organizaciones recibirán una segunda partida de 30 por ciento, condicionada a la presentación de un informe del ejercicio del gasto y el desarrollo de su programa de observación durante las primeras semanas.
El 16 de junio se recibirá otra partida similar con la obligación de entregar en esa fecha un informe a la Comisión de Fiscalización del IFE sobre todas las actividades realizadas. El finiquito de los recursos -equivalente a 10 por ciento- se entregará el 2 de octubre, con el informe final.