Nueve muertos, decenas de heridos y cientos de hectáreas contaminadas
Este año Pemex rompió récord de percances en Veracruz, con 200
Diputados y alcaldes señalan lenidad del gobierno estatal para demandar reparación del daño
Ampliar la imagen Un hombre saca lirios contaminados del r�Coatzacoalcos, luego del derrame de casi 5 mil barriles de petr�, hace un a�FOTO Valent�Alor V�uez Foto: Valent�Alor V�uez
Veracruz, Ver., 21 de diciembre. Este año Petróleos Mexicanos (Pemex) rompió el récord de accidentes en Veracruz, con 200 fugas, derrames y explosiones por los cuales murieron nueve personas, decenas quedaron heridas y se esparcieron más de 20 mil barriles de combustible en ríos, lagunas, tierras agrícolas y de pastoreo.
La pasividad del gobierno estatal para exigir la reparación de los daños en aras de negociar el Proyecto Fénix, que sólo generará algunas inversiones en petroquímica, hizo que ediles del centro, norte y sur de la entidad se organizaran para obligar a la paraestatal a responder.
''Pelearse con Pemex es rudeza innecesaria'', repitió insistentemente el gobernador Fidel Herrera cuando se le preguntó sobre los accidentes.
Hasta cuatro derrames por día
Desde junio de 2003, cuando ocurrió una explosión en la congregación La Balastrera, municipio de Nogales, que dejó seis muertos y a unos diez niños con quemaduras graves, los accidentes de Pemex aumentaron y llegaron a sumar cuatro en un día, como sucedió el 14 de octubre en Papantla, Tihuatlán y Poza Rica.
Hace un año se dieron dos de los más graves. El 13 de octubre se rompió el ducto Nuevo Teapa-Poza Rica, en la comunidad Palma Sola de Omealca; se derramaron 10 mil barriles de petróleo -que escurrieron 10 kilómetros sobre el arroyo Anteburro- y una explosión alcanzó plantíos de caña e hirió a dos personas.
Dos meses después, el 22 de diciembre de 2004, un explosión en la estación de bombeo Mazumiapan, en Santiago Tuxtla, rompió un ducto de 24 pulgadas en el municipio de Nanchital y derramó 5 mil barriles de hidrocarburo al lecho del río Coatzacoalcos. El combustible se esparció en 11 kilómetros del afluente; contaminó arroyos y la laguna Pajaritos. Miles de familias fueron desalojadas y se requirió que organizaciones internacionales rescataran aves y reptiles cubiertos de petróleo.
De los 200 percances ocurridos en 2005, al menos 40 fueron considerados ''importantes'' o ''extremadamente graves'', según la delegación estatal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
El 22 de enero la ruptura de un ducto de 12 pulgadas en Agua Dulce derramó mil 500 barriles de gasolina a los ríos El Burro y Aguadulcita. Esto causó la muerte de 450 reses y estragos en la actividad pesquera.
En 2005 destacaron las contingencias ocurridas en Nanchital y Coatzacoalcos, donde fallecieron nueve personas. El 13 de abril, en Nanchital, seis empleados de la empresa Reparaciones Navales y de Petroquímica perecieron por una fuga de amoniaco cuando perforaron por error una tubería. Más de mil 500 pobladores de comunidades cercanas fueron desalojados y 350 se intoxicaron.
El 13 de julio, una fuga en el oleoducto que va a la terminal marítima de Pajaritos, cerca de la congregación Allende de Coatzacoalcos, derivó en una explosión que mató a un obrero y al ingeniero Luis Acevedo Peña. Más de 400 lugareños tuvieron que desocupar la zona.
El 28 de noviembre una fuga de ácido de metileno en el Complejo Petroquímico de Pajaritos envenenó al obrero Santiago Palafox Ramírez.
Arterias de la muerte
De los 14 mil kilómetros de ductos que atraviesan territorio veracruzano, el denominado Nuevo Teapa-Poza Rica es el que tenido más fisuras y derrames debido a su deterioro. Pese a que desde febrero se anunció su reparación, ésta no ha concluido y en los últimos 12 meses sufrió al menos igual número de fugas.
En el municipio de Hueyapan de Ocampo, al sur de la entidad, ya suman 500 los barriles de crudo derramados en cinco accidentes. El 18 de abril, en el municipio de Nanchital, el mismo ducto vertió mil barriles de petróleo a dos arroyos que atraviesan el lugar.
''Es una arteria de la muerte'', describe el presidente municipal de Hueyapan de Ocampo, Rafael Ferma Cano, quien asegura que la cifra real del combustible derramado a cuerpos de agua y cultivos es mayor a la reportada en los informes oficiales.
Cifras de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) indican que sólo en octubre sucedieron 12 fugas en Coatzintla, Papantla, Cazones, Poza Rica, Tihuatlán, Castillo de Teayo, Hueyapan de Ocampo y Nanchital, municipios del norte y sur de la entidad.
El delegado de la Semarnat, Manuel Molina, comentó: ''Son cifras graves, sobre todo si hablamos de que en menos de 15 días se derramaron casi 2 mil barriles en diferentes puntos''.
El 2 de diciembre el subdirector de la región norte de Pemex Exploración y Producción, Alfredo Guzmán Baldizan, notificó a los alcaldes que sólo en dicha zona hubo 177 fugas. Según la paraestatal, ''la cifra es reducida en comparación con las mil 700 registradas en el año 2000''.