MEXICO SA
El ''tesoro'' económico de México
Ocupa último lugar en incremento del PIB, según la Cepal
Venezuela y Argentina, a la cabeza en 2005
EN LOS CINCO años recientes, reza la versión oficial, ningún país latinoamericano ha sido tan exitoso y ha ofrecido tantas ventajas macroeconómicas como México, aunque -una por otra- tampoco nación regional alguna, salvo Haití, ha reportado una tasa de "crecimiento" tan raquítica como la mexicana.
ENVIDIA MUNDIAL, DICEN, el "tesoro" macroeconómico que presume el gobierno del "cambio" se ha traducido en una tasa anual promedio de "avance" económico de 1.82 por ciento, con un crecimiento poblacional cercano al 9 por ciento en dicho lustro.
NO ES PARA presumirlo, pero en el último quinquenio de las cinco economías latinoamericanas más grandes, la mexicana ocupa la última posición en lo que a "incremento" del producto interno bruto se refiere (inclusive por abajo del promedio regional, 2.3 por ciento), con todo y que de ese conjunto es la que menores sobresaltos "macros" ha reportado en el periodo.
INFORMACION ESTADISTICA DE la Cepal revela que de 2001 a 2005 la economía chilena es la que mejores resultados reporta, sin que éstos sean espléndidos: una tasa anual promedio de 4.28 por ciento. Le siguen Venezuela (2.74), Brasil (2.23) y Argentina (2.22), nación ésta que en 2001 reportó una caída de 4.4 por ciento en el PIB y de 10.9 por ciento en 2002. México y su "tesoro", 1.82 por ciento.
EN LA DECADA reciente, la tasa anual promedio de "avance" del PIB nacional ha sido de 3.65 por ciento, con un crecimiento poblacional cercano al 27 por ciento. La tecnocracia que ha gobernado el país durante cuatro sexenios consecutivos promete "20 años más de estabilidad macroeconómica", pero al paso que va nadie sabe si los mexicanos sobrevivirán en el 2025.
MIENTRAS SE DESPEJA la duda, la Cepal reconoce como las economías con mejor comportamiento en 2005 a la venezolana y a la argentina, con crecimientos de 9 y 8.6 por ciento, respectivamente, el doble del promedio latinoamericano para el año.
SOBRE EL DESEMPEÑO de la primera, el organismo señala que tras el crecimiento de la actividad económica de 17.9 por ciento que se produjo en 2004, en 2005 el PIB venezolano aumentó 9 por ciento impulsado por el dinamismo del sector no petrolero. Aunque todos registraron alzas, los mayores aumentos se dieron en los sectores financiero, comercial y de la construcción. En términos del nivel del producto interno bruto global, el país recuperó lo perdido en el bienio 2002-2003 y, pese al estancamiento de la producción petrolera, a fines de año sobrepasó su máximo nivel previo, correspondiente al año 2001.
A PARTIR DEL 9 de diciembre del 2005 el país ingresó como miembro al Mercosur. Los efectos del crecimiento económico se han traducido en una disminución del desempleo y en menor medida de la informalidad, y en una recuperación de las remuneraciones reales. Gracias al auge de los precios petroleros, se pudo llevar adelante un intenso programa de acción pública social, las "misiones sociales", en su mayor parte destinadas a la población en situación de pobreza o pobreza extrema.
ADEMAS, PESE AL marcado crecimiento de las importaciones de bienes, esa nación logró un elevado superávit de la cuenta corriente, que se estima se sitúe, para todo 2005, en 18 por ciento del PIB. Para 2006 las autoridades estiman un crecimiento de 5 por ciento, una inflación media anual de 12 por ciento y el mantenimiento del tipo de cambio de 2.15 bolívares por dólar.
LA POLITICA FISCAL exhibe un carácter claramente expansivo, tal como la monetaria. De enero a septiembre, el gasto ordinario del gobierno central, de acuerdo con el Banco Central de Venezuela, aumentó 39 por ciento, a la vez que los ingresos subieron 80 por ciento impulsados por el incremento de la recaudación tanto tributaria como no tributaria, en particular el aumento de la regalía petrolera. En este contexto, las autoridades decretaron la disminución de la alícuota del IVA, del 15 al 14 por ciento a partir del 1o de octubre de 2005, reducción que se compensó con el incremento de la recaudación proveniente de la venta de petróleo y otros tributos internos, en particular el impuesto al débito bancario, y la entrega de utilidades cambiarias por parte del BCV.
POR LO QUE toca a la economía argentina, la Cepal señala que en 2005 el incremento del PIB superó el 8 por ciento, con lo cual se recuperaron con holgura los niveles máximos registrados siete años antes. Todos los componentes de la demanda mostraron aumentos significativos. En particular, la inversión se mantuvo por encima de la variación del producto y hacia finales del año el coeficiente de formación de capital habría superado el 20 por ciento del producto. La mayor inversión se financió internamente, en correspondencia con el superávit en la cuenta corriente de la balanza de pagos. Así como el volumen de las importaciones aumentó notablemente, los volúmenes exportados también alcanzaron niveles considerables.
EL GOBIERNO ARGENTINO concretó la operación de canje de bonos que habían entrado en cesación de pagos a fines de 2001, intercambio que fue aceptado por los tenedores de un 76 por ciento de la deuda elegible (alrededor de 62 mil millones de dólares). El canje de la deuda se efectuó con prescindencia del Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo con el cual el país no tuvo en curso un acuerdo durante el año. La creación de empleo contribuyó a disminuir la todavía elevada tasa de desocupación. Por su parte, aumentaron los salarios reales, principalmente por la evolución de las remuneraciones en el sector privado formal. La tasa de inflación se situó cerca del 11.5 por ciento.
LAS PERSPECTIVAS PARA 2006 apuntan a una prolongación del comportamiento expansivo de la actividad. Luego de varios años de intensa recuperación, se espera mantener una tendencia de crecimiento sostenido, lo que implicaría un ulterior reforzamiento de los flujos de inversión y ahorro.
Las rebanadas del pastel:
DE LA ARITMETICA del "cambio": el inquilino de Los Pinos inició su sexenio con una tasa abierta de desempleo de 1.5 por ciento (cifras oficiales). Ayer, ya en el sexto año, sin ruborizarse aseguró que dicho indicador se ubica en 2.9 por ciento, "el mejor nivel en la historia del país" ¿De qué país, de cuál historia? ¿No podría abstenerse de aquí al 30 de noviembre de 2006?