Agentes de EU provocan muerte de joven en el Bravo
Nuevo Laredo, Tamps., 16 de diciembre. Elementos de la Subdirección de Bomberos continúan las labores de rescate del cuerpo del joven Carlos Martínez, quien murió ahogado en el río Bravo cuando el viento producido por un helicóptero de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos volcó la cámara de una llanta en la que se transportaba junto con el menor Eduardo Segovia Luna hacia esta ciudad. El consulado de México en Laredo, Texas, empezó las investigaciones en torno a la muerte del connacional. Javier Abud, cónsul alterno, confirmó que Rafael García, del área de protección de la representación mexicana, se entrevistó con Eduardo Segovia, de 15 años, en las oficinas del Instituto Nacional de Migración. En sus declaraciones, el menor narró la forma en que su amigo ocasional, a quien sólo conocía como Carlos, murió ahogado. Ambos habían cruzado el río Bravo usando una cámara de llanta; sin embargo, al llegar al lado estadunidense se percataron de la presencia de elementos de migración. En su regreso hacia el lado mexicano, un helicóptero de la Patrulla Fronteriza se les acercó demasiado. Desde el aparato les arrojaron gas pimienta, además de que el aire de las aspas provocó que la cámara se volcara. Eduardo, quien llegó hasta el lado mexicano porque sabe nadar, permanece en la Casa Hogar del Sistema DIF de Nuevo Laredo, donde aseguró que trataba de reunirse con su madre para pasar con ella las fiestas navideñas.