La edificación de la barda criminaliza a indocumentados
La barrera en Texas, como el Muro de Berlín: CNDH
El endurecimiento estadunidense ha propiciado el deceso de más de 3 mil mexicanos, advierte José Luis Soberanes
Ampliar la imagen En la muralla de Tijuana, Ra�mos coloca una ofrenda floral dedicada a uno de los migrantes muertos este a�n su intento por llegar a Estados Unidos FOTO Ap Foto: Ap
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) afirmó que con la construcción de una barrera de mil kilómetros de largo en Laredo, Texas, se "criminaliza" la migración indocumentada, lo que "nos remite al Muro de Berlín", ya que los más de 30 mil millones de dólares gastados por Estados Unidos en 11 años de vigilancia en la frontera con México, "lejos de contener la migración, directa o indirectamente han propiciado la muerte de más de 3 mil 500 mexicanos".
En el contexto de la conmemoración del Día Internacional del Migrante, el organismo nacional exhortó al gobierno mexicano a alcanzar acuerdos en la materia con Estados Unidos, que tengan como base la regularización de quienes ya se encuentran en ese país, la aprobación de programas para trabajadores temporales y la inclusión de esquemas que faciliten la reunificación familiar.
Luego de que en ambos lados de la frontera se incrementaron las protestas de organizaciones civiles en pro de los derechos humanos de los migrantes, quienes han denunciado el paulatino endurecimiento de las acciones de "seguridad y control" en la frontera sur de Estados Unidos, la Cámara de Representantes de ese país dio a conocer la aprobación del proyecto para la construcción de un nuevo muro fronterizo que tendrá una extensión de poco más de mil kilómetros.
En un comunicado, la CNDH señaló que ante el agravamiento de las medidas de control de indocumentados, es evidente que al no consolidar su política migratoria con acuerdos que reconozcan la dimensión socioeconómica del fenómeno, sino con la aplicación de medidas coercitivas, "Estados Unidos orilla de nueva cuenta a los migrantes mexicanos y centroamericanos a buscar caminos no vigilados, en los que privan condiciones adversas, con temperaturas extremas, que convierten los intentos de cruce en operaciones de alto riesgo, que son sinónimo de muerte y de más violencia a los derechos fundamentales".
Reiteró que criminalizar la migración indocumentada sólo contribuye a alentar los abusos, la extorsión y el trato prepotente de las autoridades. Ante este escenario, el gobierno mexicano, afirmó, debe agotar los recursos legales, diplomáticos y consulares para evitar la acción de grupos que operan como guardias civiles en diversos puntos de la línea divisoria.
La CNDH subrayó que la "fuerza moral" para exigir a Estados Unidos "comprensión y trato integral al fenómeno migratorio depende de su decisión y compromiso para respetar y hacer valer los derechos de los migrantes e impedir cualquier forma de abuso contra este sector por parte de autoridades de los tres niveles de gobierno".
En cuanto al porcentaje de centroamericanos que ingresaron por la frontera sur de México con la intención de llegar a Estados Unidos, el organismo señaló que este año alcanzó un máximo histórico, al "asegurar a más de 230 mil extranjeros sin documentos, cifra superior en 7 por ciento a la registrada el año pasado", de acuerdo con datos proporcionados por el Instituto Nacional de Migración.