Vicente Pereda acudió al entrenamiento y ante la prensa pidió futbol ofensivo

Estoy a un paso de quedar en la historia del Toluca, dijo Gallego

Américo rechazó responder a Miguel Herrera; hablaremos después del juego, señaló

Tenemos hambre de gloria, a mí no me interesa la plata, sostuvo el estratega argentino

MARLENE SANTOS A. ENVIADA

Metepec, Edo. Mex, 13 de diciembre. Vicente Pereda, quien para muchos es el diablo mayor con 119 goles, se presentó ayer al entrenamiento del Toluca para reprobar sin tapujos el estilo de juego del actual conjunto mexiquense: "¡no me gusta en lo más mínimo!... pero está ganando y los resultado son los que cuentan", admitió.

Aunque sólo lo separaban unos cuantos metros del atareado técnico Américo Gallego, Pereda dijo no tener contacto con él, "ni me interesa conocerlo", y enseguida aseguró que en Diablos Rojos "hay grandes jugadores que no han sabido barajar.

"Aquí hay goleadores, pero falta que los alimenten; ¡yo los quiero ver más ofensivos!, la gente paga por ver espectáculo no para ver a su equipo defenderse."

Recordó que en la temporada 1981-82 dirigió al Monterrey, equipo por el que siente cariño, pero resaltó que el color rojo lo lleva tatuado en el corazón y quiere ver campeón al Toluca bajo el sistema que sea.

Y mientras Gallego rechazó replicar al Piojo Miguel Herrera, el ex jugador Pereda no se contuvo: "Si no le gusta el juego de Toluca, ¡que le gane! Además, qué le importa a él..."

El Tolo Gallego fue cauto ante los calificativos de Herrera. "Mi experiencia me indica que antes de los partidos no hay que hablar. Nos vamos a ver el jueves a las 15 horas en La Bombonera y después hablaremos más tranquilos", sostuvo.

Confesó que tiene problemas para definir la oncena del juego de ida por algunas lesiones, mismas que se negó a revelar porque se trata de una final y no se puede regalar nada, enfatizó.

El timonel ocupó gran parte de la rueda de prensa para explicar que no es defensivo: "Siempre fue mi intención salir a ganar. Si en algún momento el equipo se tiró para atrás fue por comodidad. Y si tú ves en problemas a tu rival, que no te puede entrar, pues quédate ahí, ¿para qué te vas a adelantar?

"Pero cuando jugamos en casa somos más agresivos, tenemos más situaciones de gol. Ahora todos se acomodaron mejor a un sistema un poquito más defensivo y a salir de contragolpe, porque juego con dos extremos y Sinha de enganche; ¡yo no sé de dónde inventan que juego con nueve atrás!... Al final cada quien se viste con la ropa que tiene", puntualizó.

Sonriente agregó: "Estoy a un paso de quedar en la historia del Toluca. La gente esta ilusionada y el mérito lo tienen los jugadores. Estamos cerca de igualar a Cruz Azul en títulos. Muchos quisieron poner piedras en el camino y yo las pateé todas", señaló.

Para Gallego no es casual alzar el cetro siempre con equipos de uniforme rojo. Al banquillo sale de negro con una vestimenta que denomina el buzo, la cual se niega a lavar.

Además los títulos logrados con los equipos argentinos River, Independiente y Newell's los obtuvo como visitante y el domingo espera la misma suerte en Monterrey. "Si no se da, de cualquier forma hemos hecho un torneo bárbaro. Pero no pienso en eso", aclaró.

Antes de retirarse confesó que lleva seis noches sin dormir bien, parte también de sus nerviosas cábalas, y reiteró: "Tenemos hambre de gloria, a mí no me interesa la plata. Dios quiera que el jueves nos vaya bien".