Usted está aquí: domingo 11 de diciembre de 2005 Capital Bajo resguardo de la Contraloría, Protección Civil de Azcapotzalco

La dependencia del DF investiga el presunto desvío de ayuda a damnificados por Stan

Bajo resguardo de la Contraloría, Protección Civil de Azcapotzalco

Según la delegación, la última remesa de donativos para afectados se recibió el 22 de noviembre

JOSEFINA QUINTERO M.

Las oficinas de la Subdirección de Protección Civil de la delegación Azcapotzalco pasaron a resguardo de la Contraloría General del Gobierno del Distrito Federal, que junto con las procuradurías generales de Justicia capitalina y del estado de México investigan el presunto desvío de víveres destinados a los damnificados por el huracán Stan en Chiapas, informaron autoridades de dicha demarcación.

El inmueble, localizado en el cruce de la avenida Manuel Salazar y el Eje 3 Norte, frente al panteón San Isidro, en la colonia San Pedro Xalpa, permanecerá cerrado mientras se lleva a cabo la indagatoria, ante la presunción de que los víveres fueron sustraídos por órdenes del ex subdirector de Protección Civil de la delegación Azcapotzalco, Martín Lugo Maldonado.

Sin embargo, las autoridades delegacionales señalaron que la última remesa de víveres donados por habitantes de la demarcación que se solidarizaron con los damnificados por Stan, se recibió el 22 de noviembre pasado, y al parecer, según los registros, ya no había provisiones.

Afirmaron que los servicios de emergencia de la delegación no se verán afectados, porque son atendidos en otras oficinas y módulos, mientras se determina la situación de los implicados y se aclara el presunto desvío de víveres. Al frente de Protección Civil de la demarcación quedó Antonio Grimaldi, en sustitución de Lugo Maldonado.

Los cambios fueron ordenados por la jefa delegacional de Azcapotzalco, Laura Velázquez Alzúa, después de la detención de cuatro empleados eventuales de Protección Civil de la jurisdicción, en el municipio de Nezahualcóyotl, estado de México, en el momento que descargaban seis toneladas de víveres en un domicilio particular, los cuales orginalmente estaban destinados para los damnificados de Chiapas, y que presuntamente fueron sustraídos de bodegas de dicha demarcación.

Los empleados fueron sorprendidos la madrugada del viernes por policías judiciales del municipio mexiquense cuando descargaban los víveres de un camión tipo torton y los introducían en el inmueble marcado con el número 29 de la calle 140, en la colonia Campestre Guadalupana.

Al no demostrar la posesión legal de los productos, fueron remitidos al centro de justicia de La Bola, donde cuatro de los seis detenidos, por elementos del Grupo de Combate a la Delincuencia del municipio, se identificaron como trabajadores de la delegación Azcapotzalco; los otros dos son el chofer del camión y su ayudante.

 
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