Reseña la obra de Demetrio Vallejo, en el homenaje que organizó la refresquera
Refrenda Encinas su respaldo a los trabajadores de la cooperativa Pascual
Lamenta Elena Poniatowska la gradual desaparición del ferrocarril en México
Ampliar la imagen La escritora Elena Poniatowska, Alejandro Encinas, jefe del gobierno capitalino, y Jos�uis Ruiz Cerda, de la cooperativa Pascual, durante el homenaje al luchador social Demetrio Vallejo FOTO Roberto Garc�Ortiz Foto: Roberto Garc�Ortiz
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas Rodríguez, refrendó el apoyo de su administración a la cooperativa Pascual Boing, en el litigio por el predio donde se ubica su planta, durante el homenaje que la embotelladora hizo al luchador social Demetrio Vallejo, previo al 20 aniversario de su fallecimiento, el 25 de diciembre próximo.
"Sí, como lo hicimos en 1983, más ahora estando en el gobierno, contarán con nuestra solidaridad y nuestro respaldo", señaló el mandatario capitalino.
En el acto, la periodista y escritora Elena Poniatowska recordó las entrevistas que hizo al dirigente ferrocarrilero cuando estaba preso, y refirió que tomó de él algunos rasgos para el personaje central de su novela reciente: El tren pasa primero.
"¿Qué queda de los ferrocarriles en México?", se preguntó la escritora; "a veces ni las estaciones. Ya ven ahora, la Biblioteca de México se levantará sobre los escombros de la antigua estación de Buenavista. Habríamos podido conservarla para recordar que la Revolución Mexicana se hizo en tren", apuntó.
Encinas describió al líder sindical: "bajo de estatura, hosco en el hablar, de rostro adusto y aparentemente difícil para entablar comunicación, la realidad es que este luchador de la izquierda mexicana reflejaba en todos sus actos firmeza en los principios y convicciones, que siempre inculcó, e intransigencia, a veces mucha intransigencia, hacia todos aquellos que no coincidieran con las aspiraciones de los más necesitados".
Recordó los inicios de Vallejo en el gremio ferrocarrilero, al unirse al llamado Batallón de Hierro, en 1926, a sus 24 años, cuando decidió "asociar su vida revolucionaria y sindical desde el campo de la izquierda".
Reseñó la fundación en Oaxaca, su estado natal, de la Federación de Trabajadores del Istmo, su paso por el Partido Comunista Mexicano, de donde fue expulsado, sin dejar por ello sus convicciones de izquierda y su adhesión a la lucha sindical ferrocarrilera; luego, su incorporación al Partido Obrero Campesino de México, su arribo a la secretaría general del Sindicato Nacional de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana, y sus 11 años en prisión tras el movimiento de 1958.
Encinas recordó también la participación de Demetrio Vallejo en la creación, con Heberto Castillo Martínez, del Comité Nacional de Auscultación y Organización, que derivó en el Partido Mexicano de los Trabajadores.
Y por último, resaltó el apoyo que Vallejo dio al movimiento de los trabajadores de Pascual y a la construcción de la sociedad cooperativa, "la más exitosa de los años recientes, ejemplo de lucha de todos los trabajadores mexicanos, donde se ha demostrado que la organización abre la posibilidad a proyectos productivos rentables y con futuro, en condiciones de competir con cualquier empresa privada en el ámbito nacional e internacional".
Al homenaje a Demetrio Vallejo asistieron también el procurador Bernardo Bátiz, y los secretarios de Gobierno, Ricardo Ruiz, y de Desarrollo Urbano, Laura Itzel Castillo, entre otros.