La decisión tiene dedicatoria para ciudadanos de otros países, asegura Gerónimo Gutiérrez

EU no reforzó su vigilancia fronteriza para detener a mexicanos, según la SRE

La reforma migratoria que se discute en Washington enfrenta una situación muy complicada, admite

FABIOLA MARTINEZ

El secretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Gerónimo Gutiérrez, reconoció que la reforma migratoria que empieza a discutirse en el Congreso de Estados Unidos enfrenta una situación "muy complicada", mientras que el Ejecutivo de ese país se ha encontrado "limitado" para regularizar el flujo de personas.

En este sentido, el reforzamiento de la frontera ordenado por el presidente George W. Bush tiene dedicatoria para ciudadanos de otras nacionalidades. "Sí han reforzado más la frontera, pero muchas medidas tienen que ver con ciudadanos de otras nacionalidades más que para mexicanos", aseveró el funcionario.

De acuerdo con cifras oficiales de organismos públicos y privados estadunidenses, cada año la economía de ese país requiere alrededor de medio millón de migrantes para mantener su ritmo de crecimiento, es decir, para mantener una tasa promedio anual de entre 3 y 3.5 por ciento es necesario que acepte en su territorio a cerca de 500 mil personas.

El subsecretario aseveró que la embajada de México en Washington y la SRE mantienen "a diario, sin excepción", contactos con congresistas del vecino país del norte, especialmente con los involucrados en este tema.

Dijo que se ha establecido comunicación con los integrantes del Comité Judicial del Congreso y del Senado de Estados Unidos para exponer los planteamientos del gobierno de Vicente Fox, aunque -admitió- la sociedad y los legisladores están muy divididos y no hay consenso respecto a las características de una reforma migratoria integral.

En la semana que concluye, el canciller Luis Ernesto Derbez reiteró que las medidas de fuerza aplicadas por el gobierno de Bush en la frontera "sólo empantanarían" una solución de largo plazo. El subsecretario Gutiérrez secundo a su jefe al señalar que cualquier enmienda que sólo incluya el tema de seguridad está destinada al fracaso.

"Si su intención es lograr un mejor manejo del tema migratorio, tenemos que mejorar aspectos de seguridad en la frontera, pero también aprobar mecanismos que permitan una migración legal, segura y respetuosa de los derechos humanos", expresó Gutiérrez al término de la ceremonia conmemorativa del 25 aniversario de la Delegación General de Québec en México.

En breve entrevista precisó que la iniciativa que podría derivar en la ansiada reforma migratoria fue aprobada este jueves en el Comité Judicial y el próximo martes será discutida en el pleno de la Cámara de Representantes, donde -dijo- es muy alta la probabilidad de que sea aprobada.

En febrero de 2006 el Senado estadunidense retomará el tema y es posible que incorpore los asuntos migratorios.

Sin embargo, aclaró el funcionario, se requiere un resultado positivo en el proceso anterior como la única alternativa para que prospere un acuerdo entre México y Estados Unidos, específicamente para la firma de un programa de empleo temporal.

El subsecretario insistió en que ante las condiciones actuales, el presidente Bush y su equipo tienen un espacio "limitado" y sólo pueden aplicar, hasta ahora, medidas administrativas, tales como el número de visa, cuya autorización depende de lo que establece la ley vigente. "Por ahora no es mucho lo que se puede hacer. No hay consenso para una reforma amplia, porque en el Senado compiten dos visiones".

Información oficial precisa que en Estados Unidos viven 11.6 millones de personas nacidas en México, de los cuales cerca de 50 por ciento (unos 6 millones de migrantes) son indocumentados, refirió el funcionario.

Elogian relación México-Québec

Antes, en la ceremonia, la ministra de Relaciones Internacionales de la provincia de Québec, Monique Gagnon-Tremblay, destacó la relación madura entre México y esa provincia canadiense y reconoció a nuestro país como un socio fundamental, básico en la integración política y económica de la región.

Detalló que el intercambio comercial Québec-México se ubica en los 2 mil 500 millones de dólares, y entre 1990 y 2005 el número de empresas quebequenses que realizan negocios en México pasó de 10 a 300. Además, hasta el año pasado las empresas quebequenses generaron aquí más de 6. 3 millones de dólares de ventas firmes. Ante el secretario de Educación Pública, Reyes Tamez, la ministra destacó también los intercambios culturales.

En tanto, el embajador de Estados Unidos en México, Tony Garza, llamó al gobierno mexicano a "renovar nuestro compromiso" para detener la práctica ilegal del tráfico de personas.

En el Día Internacional de los Derechos Humanos, el diplomático invitó "al pueblo de México" a revisar el progreso en el combate a "esa forma de esclavitud moderna" y colaborar en otras estrategias de prevención.

"Debemos renovar nuestro compromiso con las víctimas y sus familias, capturando y enjuiciando a los responsables que provocan tantas desgracias", señaló Garza, según un comunicado de prensa difundido por la embajada estadunidense.