DESFILADERO
Las antorchas de García
O cómo se fabricó otro videoescándalo contra AMLO
Una perredista conspiró con el gobierno de Nuevo León
La maniobra, en los dominios naturales de Carlos Salinas
C orrían los primeros minutos de la noche del pasado miércoles 30 de noviembre cuando un contingente de campesinos perredistas emprendió una marcha de protesta hacia el auditorio donde estaba leyendo su informe de gobierno el presidente del municipio de García, Nuevo León, el priísta Marco Antonio Hernández Arizpe.
Encabezados por su líder, Eduardo Arguijo Bladenegro, los manifestantes eran hombres, mujeres, ancianos y niños, catalogados como los más pobres entre los pobres de aquella entidad. Muchos llevaban antorchas y las llamas le daban a la escena un carácter espectacular.
Al frente de la pequeña columna iba una camioneta que transportaba el equipo de sonido y dirigía las consignas que coreaban los demás. De repente, ese vehículo embistió la valla de granaderos que resguardaba el sitio donde se desarrollaba la ceremonia, a la que había asistido el gobernador priísta Natividad González Parás.
Fue una acción prefabricada
Los granaderos retrocedieron trotando en reversa, escondiéndose tras los escudos; los campesinos corrieron en pos de ellos amenazándolos con las antorchas. Sin saberlo, los elementos de la fuerza pública obedecían órdenes para que gracias a su presunta debilidad, los desharrapados, en contraste, lucieran temibles. Desde posiciones estratégicas, las cámaras de la televisión registraban paso a paso los "disturbios" y... los transmitían, en vivo y en directo, a través del canal más visto del estado, a millones de espectadores.
La emocionante secuencia en que una viejita parece dispuesta a quemar con su hachón el escudo de un gorila uniformado, al igual que otras similares, ocupó esa noche las pantallas de los principales noticieros de la televisión en todo el país, y fue repetida con insistencia durante los días posteriores. El propósito, más que obvio, era revitalizar la idea de que el Partido de la Revolución Democrática es violento por antonomasia, una argucia que la administración de Carlos Salinas de Gortari explotó hasta la saciedad mientras asesinaba a más de 600 perredistas.
Los hechos del último día de noviembre, no está por demás decirlo, ocurrieron en los dominios naturales de Salinas y en ellos estuvieron involucrados operadores políticos de González Parás, la carta que el ex presidente incómodo guarda bajo la manga y que no utilizará sino cuando Roberto Madrazo Pintado haya dejado de ser el candidato del Partido Revolucionario Institucional, según dicen en Monterrey quienes afirman que las antorchas de García pronto serán el telón de fondo de un video contra la campaña de Andrés Manuel López Obrador, que se limitará a preguntar: "¿Esto quieres para México?".
Acuerdos y desacuerdos
A una hora en coche desde el centro de Monterrey, García es el municipio más pobre de Nuevo León. En sus comunidades típicas, tales como Santa Catarina, Chupadero, Cristaloza, Maravillas y Las Sabinillas, no hay agua potable, pavimento ni drenaje. La gente vive de recolectar un cacto llamado lechuguilla, del que extrae fibra para hilar mecates y enredar estropajos que vende a 10 pesos el kilo. Para obtener cinco kilos al día una persona debe dedicarse a la faena de sol a sol.
Gracias a un sistema de cuevas que gozan de fama regional, el turismo de Monterrey y Saltillo visita los fines de semana las famosas grutas de García, en torno de las cuales hay restaurantes, asadores de carne y espacios para asolearse y acampar. Pero la situación es de todos modos tan precaria que el acaudalado empresario y político panista, Mauricio Fernández, considerado como progre en las filas de Acción Nacional, acaba de comprar el palacio municipal y todos los edificios históricos del centro del pueblo para remodelarlos y establecer un centro de entretenimiento.
Debido al abandono y a la pobreza de su población mayoritaria, que nunca ha logrado ver satisfechas sus demandas de apoyo a proyectos productivos, García fue durante muchos años el único municipio donde no poseían influencias las fuerzas políticas tradicionales de Nuevo León, valga decir PRI, PAN y por supuesto el Partido del Trabajo. En consecuencia, allí gobernaba trienio a trienio el PRD.
Sin embargo, cuando Rosario Robles Berlanga era la presidenta nacional de ese partido y, en un cálculo superficial, decidió que no valía la pena atender los procesos electorales en Nuevo León, el PRD perdió, incluso, el municipio de García. La cosa fue más o menos así.
El veterano Eduardo Arguijo Bladenegro, que ya había sido presidente municipal, quería regresar al cargo. Para su contrariedad, el partido resolvió depositar la candidatura en manos de Abraham Colunga, porque tenía méritos y fuerza propia, según esto. Pero entonces Arguijo se ofuscó y apostó sus últimas fichas a una carta desesperada: si no le cumplían su voluntad, mandaría a su gente a votar por el PAN. Y esto fue precisamente lo que hizo.
Como el PAN carece de arraigo, los votos de Arguijo no le sirvieron de nada pero, en cambio, contribuyeron a la victoria del priísta Marco Antonio Hernández Arizpe, el alcalde actual, contra el que las antorchas se alzaron hace unos días. Quienes conocen el trasfondo de esta historia deslizan algunas preguntas no desdeñables.
¿Por qué, el 30 de noviembre, a la hora del zafarrancho había una unidad móvil de Televisa preparada para transmitir en vivo y en directo desde un pueblo que no tiene la menor importancia política ni económica? ¿Por qué, a un lado de Arguijo, estaba Socorro Ceceña, presidenta estatal del PRD, adscrita a la corriente de los chuchos? ¿Por qué, en vísperas de los hechos, Socorro Ceceña comió en el restaurante San Carlos, ubicado sobre la avenida Morones Prieto de Monterrey, en compañía de Rogelio Cerda, secretario de Gobierno de González Parás? ¿Fue Rogelio Cerda quien a raíz de ese almuerzo previno a la televisión y le aconsejó enviar una unidad móvil para ganar la noticia? ¿Por qué, cuando la fuerza pública finalmente cargó contra los manifestantes, no arrestó a Arguijo ni a Ceceña?
Todos los indicios hablan de una confabulación cuyos participantes llevaron agua a sus diferentes molinos con un solo objetivo: dañar la campaña presidencial de López Obrador. Pero la causa primera y última fue el ascenso que ha experimentado la popularidad de AMLO en los desiertos espirituales del noreste.
Pisoteados por todos, los campesinos perredistas de García fueron manipulados con muy malas artes, expuestos a la condena pública, enfrentados a la policía que los golpeó y metió en la cárcel y, como si eso no fuera suficiente aún, recibieron insultos desde el primer círculo de López Obrador, donde algunos "operadores" del tabasqueño se dan el lujo de expresar en entrevistas de radio que son "más atrabancados que Andrés Manuel". Con amigos como esos para qué necesita el Peje un nuevo videoescándalo, ahora made in Nuevo León...
Calificaciones
Una certeza empieza a extenderse no sólo por todo el país sino por los círculos financieros de Estados Unidos, en donde calificadoras como Standard & Poors ya se apresuran a asegurar a sus clientes que la estabilidad financiera de México no se verá afectada si el año próximo gana López Obrador. Exhaustos después de haberlo intentado todo para cerrarle el paso al tabasqueño, priístas y panistas se ven al borde mismo del ataque de nervios mientras lanzan y retiran o aprueban a tontas y a locas las más avorazadas iniciativas de ley para tratar de conservar el poder más allá de los límites constitucionales de este sexenio.
Pero la gente lo siente ya en el cuerpo: a pesar de las incontables trampas jurídicas y mediáticas del salinismo, López Obrador ya se fue hasta la cocina o, para decirlo en lenguaje de beisbol, ya está en tercera base. Los peligros que a partir de este momento acechan al movimiento ciudadano que aspira a llevarlo a la Presidencia de la República serán cada vez más y más grandes, y las tareas que la nueva situación plantea serán más y más difíciles.
En respuesta a la absurda tregua decretada por el IFE que empieza a correr desde mañana y hasta el 18 de enero, esta columna no tomará vacaciones de fin de año, así que si usted viaja pero tiene a la mano un cibercafé nos mantendremos en contacto porque desde ahora y hasta el 2 de julio será necesario dormir con un ojo abierto.
Y ya que habla de su vida privada, Desfiladero aprovecha para darle las muchas gracias al Club de Periodistas de México por el premio nacional 2005 al mejor artículo de fondo que le concedió el pasado martes, un galardón que llega en el mejor momento para celebrar los primeros diez años de esta página sabatina que primero se llamó El Tonto del Pueblo, más tarde Isla Canela y ahora así hasta nuevo aviso.
[email protected] // www.plandelos3puntos.org // [email protected]