Realizaron primer encuentro mundial en Monterrey
Proponen reflejar la identidad de AL ante presencia del cine de EU
Monterrey, NL, 28 de noviembre. Realizadores de México y otros países de América Latina, que asistieron al primer Encuentro Internacional de Cineastas, demandaron políticas públicas para que la región produzca filmes que reflejen la identidad propia y permitan frenar la avasalladora presencia de la industria estadunidense.
Durante el programa, que duró tres días, organizado por el Consejo para la Cultura y las Artes (Conarte), Carlos Taibo, director de Producción del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), y Víctor Ugalde, secretario técnico del Fidecine, expusieron que de las mil 245 películas que se exhibieron en 2004 en siete de los países más grandes de Latinoamérica, que cuentan con 355 millones de habitantes, solamente 118 cintas fueron producciones nacionales, y el resto en su mayoría de Estados Unidos.
El año pasado se realizaron 157 largometrajes, de los cuales 36 correspondieron a México, cuatro a Bolivia, 14 a Chile, tres a Uruguay, uno a Paraguay, 46 a Brasil y 54 a la Argentina.
En el caso de México, señalaron Taibo y Ugalde, el rezago del sector se agudizó por entrar a un Tratado de Libre Comercio (TLC) sin protección para la industria cultural.
Antes del TLC, dijo Ugalde, Estados Unidos nunca representó más de 30 por ciento del cine que se exhibía en México, hoy es 85 por ciento.
Citó que en los últimos cinco años se han recaudado más de 23 mil millones de pesos, siendo México el cuarto mercado mundial para la exhibición de películas estadunidenses y el primero de Latinoamérica.
Taibo comentó que existen en nuestro país 15 empresas exhibidoras, de las cuales cinco acaparan 87 por ciento de los ingresos, siendo las principales Cinépolis, Multimedios Cinemas, Cinemas Lumiére, Cinemex y Cinemark, las dos últimas, de capital extranjero.
En la distribución pasa lo mismo, hay 22 empresas, de las cuales las cinco principales se quedan con 88 por ciento de los ingresos, y pertenecen a compañías trasnacionales de origen estadunidense, que desde Estados Unidos diseñan las campañas de publicidad, y a veces invierten hasta tres veces en promoción respecto de lo que se invirtió en la producción.
En cambio el cine mexicano es programado en temporadas de baja asistencia y el costo de promoción va desde los 600 mil hasta los 20 millones de pesos por película, cifra muy inferior a lo que se destina a una cinta hollywoodense.
Mencionó que los costos de la producción nacional representan de 10 a 30 millones de pesos; en Estados Unidos entre cien y 550 millones; en Inglaterra cien millones promedio; 60 en Francia, y 30 millones como promedio en Brasil.
Llamó a que "comencemos a forzar a nuestros Estados y gobiernos para la crear un espacio audiovisual latinoamericano, ya que estamos atrapados en un volumen abrumador de cine y video de Estados Unidos".