Su esquema de abasto rural cumple 25 años
Grave disminución del presupuesto para Diconsa
Después de varios años de arrastrar pérdidas -que inclusive durante el sexenio de Ernesto Zedillo la pusieron al borde de la quiebra-, Diconsa revirtió la tendencia negativa y ahora opera con números negros su esquema de abasto rural -que este viernes cumple 25 años-, aunque aún padece una caída de 17 por ciento en la venta de arroz, y una disminución en el presupuesto destinado al programa de apoyo alimentario.
Este año al esquema se destinaron 500 millones de pesos para atender a 143 mil familias y en 2006 los recursos fiscales caerán a 300 millones, lo que le permitirá otorgar despensas a sólo 134 mil hogares.
Ramón Zamanillo, director del Diconsa, apuntó en entrevista que hoy se encuentran en "punto de equilibrio, pero con 340 millones de recursos fiscales" menos. No obstante, afirmó, hubo un incremento de 3 por ciento en ventas de maíz, frijol, abarrotes y mercancías generales, excepto en arroz.
Además, enumeró que para el próximo año el presupuesto será de más de mil 200 millones de pesos, 200 millones de los cuales fueron etiquetados para inversión. Esto significa, apuntó, un incremento de casi 500 millones en comparación con el ejercicio actual.
De acuerdo con el informe de actividades y autoevaluación de Diconsa 2004, la empresa registró 0.8 por ciento de aumento en ventas en comparación con el año anterior, aunque 7.8 menor al programado. La comercialización promedio mensual por cada una de las 22 mil tiendas que opera pasó de 15 mil 100 pesos al cierre de 2003, a 16 mil 100, 12 meses después. Cinco de las líneas de productos registraron incrementos: arroz, mercancías generales, abarrotes, azúcar y leche subsidiada; pero maíz, frijol y harina de maíz tuvieron una caída, comparando ambos ejercicios, de 16.4 por ciento, 15 y 6.7, respectivamente.
Sin embargo, durante el último trimestre del año anterior, la comercialización del arroz comenzó a registrar una tendencia a la baja porque, entre otras cosas, Estados Unidos, el principal abastecedor de ese grano a México, canalizó grandes volúmenes del producto a Medio Oriente; hubo incremento de precios en la materia prima, en el transporte marítimo y depreciación del peso contra el dólar. Además, porque la cosecha nacional fue menor a la que se esperaba.
Una de las acciones que ayudó a sanear a la empresa proviene de la firma de convenios con diversas dependencias federales y con los gobiernos de los estados y municipios, así como los instrumentos con motivo de emergencias, para dotarles de productos.