Aprueba resolución con propuesta de México para que se combata la xenofobia

Demanda la ONU impedir acciones de grupos particulares cazamigrantes

DAVID BROOKS CORRESPONSAL

Nueva York, 23 de noviembre. La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó hoy por unanimidad una resolución impulsada por México que, entre otras cosas, insta a los gobiernos a prevenir que ciudadanos privados no autorizados asuman funciones de seguridad pública en torno a la migración -como el caso de los minutemen y otros ejemplos de vigilantismo-, y exhorta a que se proceda judicialmente contra quienes tomen la ley en sus manos.

La resolución sobre protección de los migrantes, presentada por México y aprobada por consenso, aboga por el fin de todo tipo de racismo, xenofobia y discriminación contra migrantes, y reafirma que se deben respetar sus derechos básicos -incluso los de los indocumentados- conforme a la Declaración Universal de Derechos Humanos.

Pero lo más notable fue la inclusión de una sección, impulsada en particular por México, que declara: "Insta a todos los estados a emplear funcionarios públicos debidamente autorizados y capacitados para aplicar sus leyes de inmigración y controles fronterizos, y a que adopten medidas apropiadas y efectivas, inclusive el enjuiciamiento por las violaciones cometidas, para disuadir e impedir que particulares o grupos violen las leyes penales y de inmigración relativas a la aplicación de normas fronterizas y que indebidamente realicen acciones reservadas a los funcionarios públicos".

La resolución también solicita a los estados que "adopten medidas concretas para impedir la violación de los derechos humanos de los migrantes" durante el tránsito de éstos, y "se enjuicie a todo responsable de violar" sus garantías individuales.

Estas secciones forman parte de una amplia resolución en la que se reafirma una serie de compromisos adoptados en la Asamblea General sobre protección universal de los migrantes y una condena a todo acto de intolerancia en contra de ellos, sin importar su condición migratoria.

Al incluir una cláusula explícita sobre el fenómeno del vigilantismo, ahora se eleva a nivel multilateral oficial la queja hasta hace poco bilateral sobre actividades como las emprendidas por el Proyecto Minuteman, que desplegó voluntarios en una franja de la frontera con México con el propósito de impedir y disuadir el ingreso de inmigrantes. Hay decenas de agrupaciones alrededor del país que se han atribuido el derecho de "defender" el país ante la "amenaza de seguridad" que, según ellos, representan los inmigrantes que ingresan sin papeles.

Cabe subrayar que la medida aprobada no sólo denuncia estas actividades, sino señala que los gobiernos miembros de la ONU deberán fiscalizar a ciudadanos privados que sin autorización oficial asumen funciones de seguridad pública.

La resolución adoptada hoy también reafirma el deber de los gobiernos de actuar conforme a la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares, "particularmente en relación con el derecho que tienen todos los ciudadanos extranjeros, sea cual fuere su estatus en materia de inmigración, a comunicarse con un funcionario consular del Estado de origen en caso de ser arrestados, detenidos, encarcelados o puestos en prisión preventiva, y la obligación del Estado receptor de informar sin demora al ciudadano extranjero de sus derechos con arreglo a la convención".

Estados Unidos ha sido criticado en años recientes por México, Canadá y otros países por la forma arbitraria en que esta legislación internacional ha sido aplicada, en particular en casos donde está en juego la pena de muerte.