Incumple el acuerdo de no perseguir política ni judicialmente a El Chacho, acusa
El PRD rompe nexos con el gobierno de QR
La dirigencia nacional ofrece apoyo absoluto al ex edil de Cancún, preso desde el día 20
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Simpatizantes de El Chacho se manifestaron en las afueras de la c�el municipal de Canc�ara exigir la liberaci�el ex alcalde FOTO Victor Camacho
Foto: Victor Camacho
Cancún, Qr, 22 de noviembre. La dirigencia nacional del PRD decidió romper relaciones con el gobierno de Quintana Roo, y acusó al gobernador Félix González Canto de no cumplir un "acuerdo de civilidad" que firmaron ambas partes, por el cual su administración se comprometió a no perseguir política o judicialmente a Juan Ignacio García Zalvidea, El Chacho, dirigente del sol azteca en la entidad.
El PRD asimismo ofreció "respaldo absoluto" al ex alcalde de Cancún, acusado de peculado por casi 125 millones de pesos, en que habría incurrido durante su gestión como presidente municipal; dijo que lo mantendrá como candidato al Senado de la República para las elecciones de julio próximo.
El apoyo del PRD hacia su ex candidato a la gubernatura de Quintana Roo (que perdió ante González Canto en febrero pasado) se mostró este martes con una visita multitudinaria de dirigentes y simpatizantes a El Chacho, aprovechando que el martes fue día de visita en la cárcel municipal.
Los perredistas también se reunieron con la representación del gobierno del estado en Cancún. Ahí se anunció que el dirigente nacional del PRD, Leonel Cota Montaño, visitará a El Chacho; no se descartó que encabece una marcha el próximo 30 de noviembre.
El PRD informó que la ruptura significa que no habrá ninguna relación entre las autoridades estatales y los órganos partidarios, ni con los servidores públicos locales del sol azteca, y que Cota Montaño se encargará de todo contacto.
Los siete diputados locales del PRD se alejarán del gobernador del estado. Algunos incluso habían realizado viajes al extranjero con Félix González.
El PRD nacional consideró que el encarcelamiento de García Zalvidea es parte de una estrategia nacional del PRI para reducir las posibilidades de los candidatos perredistas fuertes en diversos estados.
Sobre el ex alcalde y ex funcionarios de su administración pesan aún otras 11 demandas penales que podrían proceder en breve por diversos desvíos de recursos por cantidades millonarias.
Entre otras acusaciones contra García Zalvidea está haber encargado obras por 160 millones de pesos sin licitación, y dejar una deuda de 35 millones de pesos con "proveedores fantasma".