MEXICO SA
Remesas, no programas electoreros, combaten la pobreza
Son la mayor fuente de capital externo en el llamado tercer mundo, según el Banco Mundial
LOS GOBIERNOS INSISTEN en negarlo -entre ellos el del pato salvaje-, pero la evidencia empírica demuestra que son los expulsados de sus paupérrimos lugares de origen, y no los burocráticos cuan electoreros programas asistenciales, los que con mayor eficacia combaten la pobreza en sus respectivos países.
EN 2005, POR MEDIO de las remesas, 200 millones de expulsados de su tierra, fundamentalmente por razones económicas, inyectaron a sus naciones de origen, sin condiciones, el doble de recursos que los provenientes de la siempre cacareada "ayuda internacional" a los países en desarrollo.
LO ANTERIOR NO SE sustenta en datos de organizaciones globalifílicas o anti neoliberales, sino en información del siempre casto y progresista Banco Mundial, institución que en sus Perspectivas para la economía mundial 2006 -que recién divulgó- subraya que en el presente año los emigrantes enviaron oficialmente más de 167 mil millones de dólares a sus familias en los países en desarrollo, monto que duplica con creces el nivel de la "ayuda internacional", provenga ésta de organismos multilaterales o de las naciones desarrolladas.
A LA FECHA, 200 MILLONES de personas han emigrado de sus lugares de origen en busca de mejores condiciones de vida, negadas en sus países natales por razones de extrema pobreza ligadas al apartheid económico que se ejerce en buena parte del planeta.
EL BANCO MUNDIAL advierte que esos 167 mil millones de dólares -el doble que cinco años atrás- no revelan el verdadero alcance de las remesas canalizadas al mundo en desarrollo, ya que muchos emigrantes envían dinero por medio de canales no oficiales, con lo que el monto real de dichas remisiones superaría los 250 mil millones -sólo en 2005-, cifra prácticamente igual a la inversión extranjera directa registrada por las naciones subdesarrolladas en igual periodo.
LAS REMESAS SE convierten así en la mayor fuente de capital externo en el otrora llamado tercer mundo, bloque de naciones al que la globalización simplemente modificó la denominación (ahora son "países en desarrollo"), pero sin alterar un ápice su condición socioeconómica.
A LO LARGO DE 2005 el monto mundial de remesas (sin considerar los canales no oficiales) será de 232 mil millones de dólares, de los que 72 por ciento terminará en los países subdesarrollados
LA INFORMACION del Banco Mundial señala que en 2005 India refrendará su liderazgo en este renglón, dado que captará la mayor cantidad en remesas, seguida por China, México, Francia y Filipinas. Sin embargo, en términos de porcentaje del producto interno bruto serán las naciones más pequeñas, como Tonga, Moldavia y Lesotho, los mayores receptores.
A LO LARGO DEL gobierno del "cambio", las remesas de la paisanada acumulan alrededor de 69 mil millones de dólares, cantidad 8 por ciento superior, aproximadamente, al monto de las reservas internacionales del Banco de México que la administración Fox mantiene intocadas para garantizar el pago de la deuda externa y comprar estabilidad macroeconómica.
EL NUMERO DE emigrantes a nivel global, dice el organismo financiero, se aproxima a 200 millones. Su productividad y ganancias constituyen una fuerza poderosa para la reducción de la pobreza, especialmente en países de bajo ingreso. Por ejemplo, esa inyección de dinero pueden haber reducido la pobreza en 11 puntos porcentuales en Lesotho, cinco puntos en Ghana y seis puntos en Bangladesh.
UNA MAYOR EMIGRACION de trabajadores no calificados de los países subdesarrollados a los desarrollados podría aportar una contribución significativa a la reducción de la pobreza. Un aumento de emigrantes que incremente en 3 por ciento la fuerza laboral en naciones de ingreso alto en 2025 elevaría los ingresos reales a escala global en cerca de 356 mil millones de dólares, de tal suerte que, según el Banco Mundial, los primeros "rivalizarían con los beneficios potenciales de la reforma global del comercio de mercancías".
PARA EL BANCO MUNDIAL la situación no es tan complicada: la forma más factible de aumentar dicha emigración, sostiene, es por medio de programas migratorios administrados por los países emisores y los receptores, en los que se combinara la migración temporal de trabajadores no calificados con incentivos para su regreso, es decir, algo a lo que el mundo desarrollado ferozmente se niega, comenzando por Estados Unidos y los emigrantes mexicanos.
LOS PROGRAMAS DE migración administrada (entre ellos las visas de trabajo temporal para emigrantes no calificados en países industrializados) ayudarían a aliviar los problemas vinculados con las grandes corrientes de emigrantes irregulares y permitiría un mayor movimiento de trabajadores temporales. Además, contribuiría a una importante reducción de la pobreza en las naciones originales de los emigrantes, entre los mismos emigrantes y sus familias y, a medida que aumentan las remesas, en la comunidad en general.
EN EL INFORME del Banco Mundial se señala que los programas de migración temporal tienen varias ventajas, entre ellas, aliviar las tensiones sociales al restringir el asentamiento permanente, así como limitar la posible carga que esto supone para el erario público, ya que los emigrantes tienen un trabajo garantizado.
PROPUGNA TAMBIÉN por estrategias destinadas a que "algunos países" eviten la fuga de cerebros. Pueden ayudar a contener el éxodo de profesionales claves si mejoran las condiciones laborales en los trabajos públicos e invierten en investigación y desarrollo. Para alentar el regreso de emigrantes calificados, el informe destaca que los países deben identificar las oportunidades de trabajo para ellos, permitir la doble nacionalidad y asegurar que las prestaciones de seguridad social sean transferibles, pero de modificar el modelo económico que acicatea la expulsión de mano de obra y el apartheid, nada.
Las rebanadas del pastel:
QUE AYER SE celebró el 95 aniversario ¿de qué?