Sí está en condiciones mentales para enfrentar un juicio, según exámenes médicos
"Dios me perdonará si me excedí", dijo Pinochet a juez que lo investiga por crímenes
Santiago, 16 de noviembre. "Dios hace las cosas; él me perdonará si me excedí en algunas, pero no creo", dijo el ex dictador chileno Augusto Pinochet ante el juez Víctor Montiglio, que lleva adelante la causa por la Operación Colombo, en la que fueron asesinados más de un centenar de opositores al régimen castrense (1973-1990), según extractos del interrogatorio a que fue sometido el lunes pasado el ex gobernante de facto.
En este contexto, fuentes judiciales señalaron que los exámenes médicos practicados a Pinochet arrojaron que sí está en condiciones mentales para enfrentar un juicio ya que la "demencia moderada" que sufre no es obstáculo para impedirlo.
"Lamento y sufro por esas pérdidas (humanas), pero Dios hace las cosas, él me perdonará si me excedí en algunas, pero no creo", sostuvo ante el juez especial del caso que lo interrogó en su domicilio en el este de Santiago, en referencia a los más de 3 mil muertos y desaparecidos que provocó su régimen militar.
En su respuesta a las 20 preguntas que en más de dos horas le formuló el magistrado, Pinochet respondió vagamente con un "no me acuerdo" o "son cosas que sucedieron hace 30 años", siempre en relación con la Operación Colombo, acerca de la desaparición de 119 opositores por agentes de la ex Agencia de Inteligencia Nacional (Dina), su policía secreta.
"No me acuerdo, pero no es cierto. No es cierto, y si fuera cierto, no me acuerdo", dijo al eludir su responsabilidad como alto mando directo de la Dina, cuyo jefe, el ex general Manuel Contreras -hoy en prisión-, desde hace tiempo lo incrimina de haber dado las órdenes en forma personal sobre las acciones represivas contra los opositores políticos de izquierda.
Aunque afirmó que "nunca yo podría hacer una cosa así" y "¿por qué podría defender a la Dina si yo no sabía?", añadió que "no era problema mío, yo era presidente y después estaban los servicios de inteligencia. Eso era cosa, me imagino, de mandos medios. Ni Cóndor -otra operación militar- ni nada era problema mío".
No obstante, pareció contradecirse en otro pasaje al afirmar que "todo lo que hice, todo lo que actué, todos los problemas se los dedico a Dios, se los dedico a Chile, porque de esa forma se permitió que el país no fuera comunista y siguiera como es hasta hoy", al justificar el golpe militar contra el gobierno socialista de Salvador Allende.
El abogado querellante en la causa, Hernán Quezada, dijo que "los expertos coinciden en que en todos los exámenes practicados hubo por Pinochet sobresimulación para tratar de parecer más grave los síntomas de su enfermedad neurológica".
Agregó que "los exámenes son concluyentes en cuanto a que Augusto Pinochet, desde el punto de vista siquiátrico, es una persona normal que puede dar respuestas, sin perjuicio de que tiene afecciones de carácter neurológico".
Los documentos médicos fueron dados a conocer a las partes y sostienen, en el diagnóstico de demencia subcortical, que a pesar de ese padecimiento por deficiente irrigación cerebral, no implica una demencia o enajenación mental que impida que el ex dictador sea juzgado.