Les niegan medicinas y los tratan como de alta peligrosidad, por padecer el mal, según ONG
Discriminan a reos con VIH en penales de Tamaulipas y Sonora
El de Arafat, interno en el Cereso de Matamoros, sólo un ejemplo: cuando acudió a declarar lo encadenaron junto con otros dos reclusos sanos a pesar de que iba lesionado y sangraba
Ampliar la imagen Presos en el penal de Matamoros n� dos denunciaron malos tratos por estar enfermos de sida FOTO Juan Jos�ern�ez Reyna Foto: Juan Jos�ern�ez Reyna
Matamoros, Tams. 15 de noviembre. Los presos infectados con el virus de inmunodeficiencia adquirida (VIH/sida) enfrentan el abandono de las autoridades carcelarias de este municipio, las cuales no sólo se niegan a brindarles la asistencia médica adecuada: cuando tienen que hacer sus declaraciones judiciales son trasladados desde las celdas encadenados de pies y manos, denunció el Organismo de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos Emiliano Zapata.
Tal es el caso de Arafat, sinaloense de 21 años de edad, y uno de los 15 internos que padecen este mal, acusado del asesinato de su pareja sentimental, el pasado viernes. Acudió a rendir su declaración al juzgado tercero penal ensangrentado y esposado con dos detenidos más.
"Es inhumano que a tres días de su detención no se le haya dado atención médica, máxime cuando sabemos que como portador del virus del sida necesita cuidados especiales y en el Centro de Readapación Social no lo han dejado ni bañarse", señaló la presidenta de la citada organización, Luz María González Armenta.
Agregó que independientemente de la situación jurídica de Arafat, y de ser o no responsable del homicidio que se le imputa, tiene derecho a revisiones médicas, así como a un trato digno.
Sin embargo, ocurre todo lo contrario: "lo que vemos aquí es que viene amarrado como si fuera un animal o un reo de alta peligrosidad.
"Por su estado no debería estar atado a otras personas, que nos manifestaron el temor de ser contagiada, ya que él viene sangrando, tiene heridas en los pies que no le han sido curadas, además de golpes en la cara que según nos refiere le propinaron los policías ministeriales después de su detención", explicó González Armenta.
Por su parte, Ral Gómez, abogado defensor del presunto homicida, señaló que el director del penal número 2 de Matamoros, José Amado López, ha hecho caso omiso a su solicitud de ubicarlo en un área especial y que sea atendido por un especialista.
"El muchacho está mal, aparte de ser portador del sida tiene esquizofrenia y necesita un medicamento que no le han suministrado", indicó.
Esta situación también la enfrentam los 16 reos con el virus del VIH/sida que se encuentran recluidos en los centros penitenciarios de Hermosillo y Ciudad Obregón, en Sonora, los cuales son discriminados por la Secretaría de Salud al no atenderlos debidamente, denunció Héctor Corro Picos, director del Sistema Penitencial de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
El funcionario expuso que estas personas no son atendidos debidamente, lo que pone en riesgo su vida. Asimismo, indicó que existe el peligro de que la enfermedad se propague hacia otros reclusos, ya que "los enfermos de sida se encuentran en condiciones infrahumanas y antihigiénicas", concluyó.