La democracia no es tarea exclusiva del IFE: Desde la fe
En 2006 la Iglesia católica dará ''oración y orientación''
El presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y obispo de León, José Guadalupe Martín Rábago, advirtió que la Iglesia católica participará de manera abierta en los comicios presidenciales de 2006, e incluso orientará a los ciudadanos para que emitan su voto.
En conferencia de prensa, luego de la homilía que ofrece cada domingo, el prelado afirmó que ''la Iglesia quiere promover el diálogo y la participación ciudadana orientando, guiando y orando para que las siguientes elecciones refuercen la confianza del país en sus autoridades, se consolide la democracia, se eleve la calidad del debate político y los mexicanos avancemos en la construcción del país que todos anhelamos''.
Explicó que las elecciones presidenciales de 2006 representarán para México un año histórico para consolidar la democracia, ''y para sentar las bases de un país más justo y más humano; son ocasión para preguntarnos qué tipo de país queremos y qué medios habremos de utilizar para construir y transformar positivamente nuestra patria''.
El jerarca católico consideró que ''en esta hora trascendental para México se corren riesgos como que tanto las ideas como las convicciones puedan ser fácilmente manipuladas por razones de poder''.
Por lo anterior, agregó Martín Rábago, resultan imprescindibles ''el acuerdo y la unidad, la reflexión serena y el amor por nuestra nación; la participación de la Iglesia irá desde la oración hasta la orientación a los ciudadanos para que avancemos en la construcción del país que todos anhelamos''. Asimismo, el presidente de la CEM advirtió que un ''grave riesgo'' en los próximos comicios federales, entre otros, es el abstencionismo a consecuencia de la falta de credibilidad de los mexicanos en las autoridades.
''Estos últimos escándalos (videos) que se difundieron últimamente pueden repercutir en el ánimo de muchos, sobre todo en los jóvenes, y pueden causar escepticismo, la sensación de que se vive en un país en el que hay pocas esperanzas de una transformación a través de los caminos democráticos'', concluyó.
Desde la fe saluda decisión de Bucareli
La Arquidiócesis de México destacó que las leyes electorales ''de ninguna manera dan facultades exclusivas'' al Instituto Federal Electoral (IFE) para promover ''la participación ciudadana'' en los comicios de 2006, asunto que, dijo, es ''competencia de todos''.
A través de su órgano de difusión Desde la fe, celebra que no haya prosperado la queja que el IFE presentó hace unas semanas ante la Secretaría de Gobernación contra los obispos católicos de México que ''están promoviendo los talleres para la democracia en todo el país''. Lo anterior, en alusión a los recién concluidos trabajos de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (CEPS) en San Luis Potosí.
''La democracia es responsabilidad de todos, especialmente en un país donde está constantemente amenazada por muy diversos y oscuros intereses. La ley nos asiste'', subraya en torno a la respuesta de Gobernación en favor de la Iglesia católica.
En la página editorial de Desde la fe, la arquidiócesis sostiene que la respuesta de Bucareli fue ''muy acertada al indicar que en nada contravienen estos talleres las leyes vigentes, porque no se trata de propaganda partidista y, por otra parte, las mismas leyes de ninguna manera dan facultades exclusivas'' al IFE para promover la participación ciudadana.
''Los creyentes -dice- también tienen propuestas válidas para el conjunto de la sociedad, y en un sistema democrático marcado por el pluralismo, todos tenemos derecho a expresar nuestras convicciones y defender nuestras ideas, respetando los distintos puntos de vista.''
En cuanto a la participación de la Iglesia católica argumenta que es ''una institución que tiene una finalidad educativa a partir de sus principios doctrinales'', además de que ''junto a sus actos de culto religioso desarrolla una labor formativa de la conciencia y de la moral personal y social de todos sus integrantes''. Por tanto refiere que su tarea no termina en la realización y cumplimiento de un ''rito'', sino en la ''exhortación a la coherencia entre la fe y la vida de todos los fieles para contribuir positivamente en la construcción de la sociedad''.
Dice estar consciente de que la Iglesia católica ''nada tiene que hacer como institución en asuntos de lucha partidista, pero mucha responsabilidad tiene en la construcción de la sociedad a partir de sus valores''. Por otro lado dice que el IFE tiene la ''enorme responsabilidad de asegurar la realización de las elecciones federales con transparencia, sin fraudes, con amplia participación ciudadana y observancia de la ley''.