Se concreta la posibilidad de que la paraestatal disponga de $23 mil 300 millones
Destete de finanzas públicas de Pemex con el nuevo régimen fiscal
El Senado cerró de nuevo la puerta a la pretensión de privatizar la empresa: Garza Galindo
Se eliminaron las disposiciones de un gobierno corporativo e incluir consejeros independientes
Ampliar la imagen Los senadores Laura Alicia Garza Galindo y Emilio Gamboa Patr�ayer en la casona de Xicot�atl FOTO Jes�llaseca Foto: Jes�llaseca
Después de un largo y accidentando proceso legislativo, que incluyó pasar cinco veces por ambas cámaras, debido a que el presidente Fox vetó la legislación, ayer el Senado de la República aprobó en lo general el Régimen Fiscal de Pemex y eliminó dos párrafos del artículo cuarto transitorio, en los que, a juicio de los legisladores del PRI y el PRD, se abría de nueva cuenta la posibilidad de avanzar hacia la privatización de la paraestatal.
Puesto que la Cámara de Diputados, que fue la de origen, no podía hacer ya nuevos cambios a la minuta, el Senado le pidió remitir al Ejecutivo el proyecto -excepto las modificaciones- a fin de que esa reforma al capítulo decimosegundo, título segundo, de la Ley Federal de Derechos, pueda promulgarse y entrar en vigor en enero próximo.
Los senadores priístas y perredistas, quienes dejaron atrás el intento de albazo legislativo que pretendía dar el panista Fauzi Hamdan desde la Comisión de Hacienda, acordaron etiquetar en la Ley de Ingresos y en el Presupuesto de 2006 los recursos suficientes a fin de que en realidad Pemex pueda disponer de los 23 mil 300 millones de pesos que le corresponderán el año próximo, de acuerdo con su nuevo régimen tributario.
"Con esos recursos, Pemex logrará recuperar su posición de empresa de vanguardia mundial y ya no habrá justificación alguna para seguir intentando la privatización, salvo que se persevere en un compromiso con intereses ajenos a los nacionales", señaló en tribuna la senadora del PRI, Laura Alicia Garza Galindo.
Recalcó que se eliminaron de la minuta enviada por la Cámara de Diputados los párrafos segundo y tercero del artículo cuarto transitorio, donde se establecía indebidamente un gobierno corporativo para Pemex y la posibilidad de incluir en el consejo de administración de la empresa a los llamados consejeros independientes, porque "no queremos que se busquen por ahí nuevas vías para intentar la privatización de la empresa".
Se preguntó si ese gobierno corporativo no tenía la intención de que sean los accionistas minoritarios los que tomaran a la larga las decisiones en Pemex.
Garza Galindo, quien se encargó todo el fin de semana de analizar a fondo la minuta, después de parar el intento de Hamdan de que se aprobara tal cual el pasado jueves, agregó que con el Régimen Fiscal de Pemex ayer aprobado, la paraestatal tendrá los recursos suficientes -que habrán de plasmarse en la Ley de Ingresos y en el Presupuesto de 2006- , en una transición pactada a seis años -originalmente eran cuatro, pero se aceptó la observación de Fox para que se ampliara dos años más-, con el objetivo de despetrolizar así las finanzas públicas.
Se inicia "el destete de las finanzas públicas", pero sin el riesgo de una crisis fiscal para el Estado, ya que la hacienda pública retendrá la renta petrolera necesaria para cumplir con los programas de la Federación.
Garza Galindo destacó que en la Ley de Ingresos de 2006 se deberá asegurar que parte de la recaudación se destine al Fondo para la Ciencia y la Tecnología en Materia Petrolera. Fue de hecho uno de los puntos que más discutieron los senadores en los pasados cinco días, toda vez que detectaron que la Secretaría de Hacienda prácticamente quitaba a Pemex los recursos que el Congreso le asignaba a través del nuevo régimen tributario, al elevar el superávit de la paraestatal.
Por ello, ante el pleno, el senador Manuel Bartlett Díaz destacó que lo fundamental fue garantizar los recursos, los más de 23 mil millones de pesos a Pemex, para evitar "toda maniobra de la Secretaría de Hacienda".
Refirió que se dejarán también claramente establecidos en la Ley de Ingresos los recursos que se otorgarán a la Auditoría Superior de la Federación, a fin de que esa instancia tenga la capacidad para garantizar el análisis permanente de las finanzas de Pemex, que ya no podrán ser manejadas con la absoluta discrecionalidad por funcionarios de Hacienda y de la propia paraestatal.
También en tribuna, el senador priísta Oscar Cantón Zetina dijo que los más de 23 mil millones de pesos adicionales con que Pemex contará le permitirán invertir en modernizar sus ductos, para evitar los muchos accidentes que tantas vidas han costado.
Sobre el tema, el perredista César Raúl Ojeda expresó que resta aún encontrar los mecanismos que garanticen que esos más de 23 mil millones de pesos llegarán a Pemex, a fin de que pueda desarrollarse.
En entrevista, el secretario de la Comisión de Hacienda, Alejandro Gutiérrez, precisó que lo primero que harán es ajustar en la Ley de Ingresos el 6.5 por ciento del excedente con cargo a Pemex, a fin de que sea acreditable contra el pago de impuestos federales. Con ello, dijo, se tendrán entre 10 y 11 mil millones de pesos y para conseguir el resto se "exploran otras opciones", entre ellas utilizar parte del excedente petrolero, sobre todo porque el precio internacional del crudo estará por encima de los 31.50 dólares por barril estimados en la Ley de Ingresos para 2006.
Para superar el problema que implicaba modificar una minuta que había pasado ya tres veces por la Cámara de Diputados y dos por el Senado -debido a que el veto de Fox la hizo regresar a San Lázaro- ayer los senadores decidieron cambiar de nuevo la iniciativa, pero, a fin de salvar el escollo legislativo, el pleno determinó pedir a la colegisladora que pase el proyecto al Ejecutivo sólo donde hay acuerdo entre ambas cámaras, a fin de que sea promulgado.
Los cambios al cuarto transitorio quedan fuera y con ello se evitó el riesgo de invalidar todo el Régimen Fiscal de Pemex, que podrá entrar en vigor el próximo año. La molestia del panista Fauzi Hamdan fue tal que no participó en la discusión. Ni él ni ningún otro panista.