Si su intención era dividir una vez más a América Latina, salió victorioso, advierte
En Mar del Plata Fox hizo el ''trabajo sucio'' a Estados Unidos, señala Green
Rebajó la política internacional al convertirse en cabildero de Bush, lamentan diputados
Si la intención del presidente Vicente Fox Quesada "era dividir una vez más a América Latina, entonces el mandatario sí salió victorioso" de la Cumbre de las Américas, en la que hizo "el trabajo sucio de Estados Unidos", sostuvo ayer Rosario Green Macías, ex secretaria de Relaciones Exteriores.
Al realizar ayer un balance de la participación de Fox Quesada en dicha cumbre afirmó que no sólo "llevó las relaciones con América Latina a esta desgraciada situación" al pretender que se aprobara el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA), sino que al posponer su salida de Mar del Plata provocó inconvenientes en el aeropuerto.
En la Cámara de Diputados, legisladores de PRI, PRD y PT lamentaron que el Presidente de la República rebajara la política internacional de México hacia América Latina, con tal de "hacerse el simpático con el gobierno de Estados Unidos y convertirse en el cabildero número uno de George W. Bush".
El secretario de la Comisión de Relaciones Exteriores, Alberto Aguilar Iñárritu, dijo que las próximas peticiones del mandatario para salir del territorio nacional "serán revisadas con lupa, porque incurre, con sus libertades verbales que son excesivas, en daños graves a la nación".
El legislador priísta dijo que la relación con Estados Unidos no está reñida con la armonía con los países latinoamericanos, y respecto de la posición que asumió ayer el presidente de Argentina, Nestor Kirchner, en el sentido de que Fox se ocupe de los asuntos de México, señaló que tiene razón, porque lo mismo haría cualquier mandatario mexicano si su homólogo argentino se entrometiera en los asuntos nacionales.
Por su parte, el coordinador de la bancada del PT e integrante de la citada comisión, Alejandro González Yáñez, cuestionó que el mandatario mexicano "asumió en Mar del Plata el papel de porrista de George W. Bush, de dar la cara por los gringos en contra del sentir de la nación mexicana. Lo que hizo al intervenir con las decisiones de Argentina fue asumir una posición intervencionista de la peor ralea y además rastrera".
Refirió que el proyecto del ALCA nunca se ha discutido desde el gobierno federal mexicano, ni se ha auspiciado un debate en el Congreso; su negociación ha sido producto de una política clandestina, porque en el fondo se busca esconder que se trata de un proyecto anexionista.
El diputado perredista Gerardo Ulloa Pérez aseveró que Vicente Fox trata de llevar al país a un acuerdo comercial que pretende capitalizar los beneficios económicos para Estados Unidos y socializar las pérdidas para México y el resto de los países latinoamericanos.
A su vez, la dirigencia nacional del PRD sostuvo que la posición del presidente Vicente Fox en la cumbre fue equivocada y no corresponde con el sentir de la sociedad mexicana. El secretario de Relaciones Internacionales de este instituto político, Saúl Escobar, lamentó la "vergonzosa actitud" que adoptó el jefe del Ejecutivo en la reunión internacional, pues se asumió como defensor de los intereses promovidos por la administración Bush, sin que se lo hubieran pedido.
Para el dirigente perredista, esta decisión quizá obedece a un cálculo político con miras a las elecciones federales del próximo año, pues todo parece indicar que Fox pretende mostrarse dócil ante Estados Unidos para conseguir al menos la creación de un programa de trabajadores migratorios temporales.
Escobar criticó la postura del jefe del Ejecutivo mexicano, toda vez que da la espalda a Latinoamérica y se adhiere a los intereses de la Casa Blanca, en una estrategia diseñada desde que Jorge G. Castañeda era el secretario de Relaciones Exteriores. De acuerdo con tal diseño, México debe integrarse a Estados Unidos para resolver sus problemas económicos.
Por su parte, el consejero jurídico de la Presidencia de la República, Juan de Dios Castro Lozano, lamentó "esas expresiones" del presidente de Argentina. Entrevistado brevemente, al término de la ceremonia en la que el Consejo de la Judicatura Federal celebró sus 10 años de existencia, dijo que a él no le correspondía emitir un juicio sobre las declaraciones del mandatario argentino, por tratarse de una materia de política internacional, aunque dejó en claro su desaprobación a las expresiones de Néstor Kirchner.
(Georgina Saldierna, Enrique Méndez, Roberto Garduño y Jesús Aranda)