Hebert Hernández, de la UAQ, y Alfredo Varela, de la UNAM, son los autores
Premian estudio útil como modelo en tratamientos para Parkinson
Los investigadores recibirán mañana el galardón Alejandrina 2005, que otorga la universidad de Querétaro, en el área científica y tecnológica
Continúan experimentando en animales
Querétaro, Qro., 7 de noviembre. Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), en coordinación con el Instituto de Neurobiología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), campus Juriquilla, detectaron que el grupo de neuronas dopaminérgicos, que se encuentra en el cerebro, responde a moléculas semaforinas con las que genera una proyección de los axones (especie de "brazos" que nacen dentro de esas células) en el sistema nervioso central.
Hebert Luis Hernández Montiel, investigador y catedrático de la Facultad de Medicina, prevé que este estudio sirva de modelo para tratar el mal de Parkinson en la etapa de rehabilitación del paciente, pues los resultados obtenidos son los únicos en su tipo en el mundo. Para ello, ya realizan pruebas. Siembran neuronas en la sustancia negra de animales para conocer si tienen reacción positiva o negativa.
Este lunes, la UAQ dio a conocer a los ganadores del premio Alejandrina 2005, con el que se reconocen los trabajos en materia de investigación realizados recientemente en las áreas de ciencias sociales y humanidades, científica y tecnológica, medio ambiente y creación artística.
Hebert Luis Hernández Montiel, de la Facultad de Medicina de la UAQ, y Alfredo Varela Echavarría, del Instituto de Neurobiología de la UNAM, obtuvieron el primer lugar en el área científica y tecnológica por la investigación El papel de las semaforinas en la proyección de axones dopaminérgicos nigroestriatales.
Hernández Montiel explicó que las células son organismos que se encuentran en el sistema nervioso central y conforme se van desarrollando emiten axones cuyo papel es viajar en el medio embrionario entre otro tipo de células o poblaciones de éstas hasta identificar el sitio donde van a "terminar sus blancos finales".
Las moléculas semaforinas desempeñan un papel de control en la proyección de ciertas neuronas. "Lo que encontramos es que el grupo de neuronas dopaminérgicas, que son las del área neuroencefálica, responden a cierto tipo de moléculas que son de la familia de las semaforinas y hemos podido identificar que en diversos estadíos del desarrollo embrionario desempeñan un papel importante al orientar el sentido del crecimiento."
Al lograr que esas moléculas orienten el sentido del crecimiento, producen su propio tracto, que es una serie de axones que se encuentran proyectados dentro del sistema nervioso central.
Funcionamiento de sistemas moleculares
Aunque inicialmente la intención de los investigadores no era estudiar el mal de Parkinson, sino el funcionamiento de sistemas moleculares en la proyección en el sistema nervioso central, tras los resultados obtenidos ahora realizan un análisis en relación con ese padecimiento, ya que se dieron cuenta de que la investigación tiene potencial al utilizar moléculas que orientan a las neuronas embrionarias en cerebros maduros, es decir, remplazar las neuronas que mueren en los pacientes con el mal de Parkinson por alguna causa desconocida.
Explicó que en México aproximadamente medio millón de personas padecen esta enfermedad, de la que se desconocen las causas, por lo que no se puede dar un tratamiento adecuado.
Con el estudio que realizan consideró que pueden obtener resultados positivos para atender esta enfermedad en su nivel de tratamiento, pues "mucho de las terapias para Parkinson, aún en etapa experimental, es que se trata de volver implantar células nerviosas en el sitio en que murieron; el problema es que no solamente son las células, sino se necesita todo un circuito en el que las neuronas proyecten axones para que hagan contacto con el sitio final".
Lo que desconocen los investigadores son los efectos que tienen esas neuronas durante la proyección de un organismo. En el laboratorio de la Facultad de Medicina de la UAQ experimentan con ratas para tratar de identificar "si esas moléculas tienen otro efecto, si participan en la consolidación de la proyección, si se apagan después porque ya no son necesarias, o si después de que sufren una lesión nosotros vamos y seleccionamos las neuronas de la sustancia negra. Estas neuronas informan sobre uno o el medio circundante de la proyección, expresa o no".
El investigador explicó que las moléculas semaforinas en una lesión cerebral vuelven a tener funcionamiento, pero ahora el papel que desempeñan es de inhibidor en lugar de resolver el problema que aqueja al paciente, motivo por el cual estudian en animales el potencial que tienen, ya sea que influya en la regeneración o la bloquee.
"Si podemos dar una señalización en el tracto para neuronas que son implantadas en pacientes que tienen Parkinson, podría ser un modelo útil o una herramienta para tratar que esas neuronas, una vez que se ponen en la sustancia negra, promuevan una proyección de los axones hacia su blanco final y remplazar la señalización que el organismo maduro ya no tiene", dijo en entrevista.
Otros galardonados
Entre los galardonados con el premio Alejandrina 2005 destacan: Jorge Aranda López, con el segundo lugar en el área de ciencia y tecnología, por el trabajo Regulación hormonal de la neovascularización ocular, por medio del cual identificó la forma en que participa un fragmento de la hormona prolactina que inhibe el crecimiento de vasos sanguíneos en un paciente con diabetes, y José Guadalupe Hernández Oria, investigador independiente, el primer lugar en materia de medio ambiente, con el trabajo Dinámica ecológica del bosque tropical caducifolio del sur del estado de Querétaro: un tipo de vegetación amenazada.
En el área de ciencias sociales y humanidades, obtuvo el primer lugar Salvador Granados Saucedo, con Los alineamientos mágicos de la zona arqueológica de El Cerrito, Querétaro. Un estudio sobre astronomía, calendario, cosmovisión y culto a los cerros. Abelardo Rodríguez Macías, el primer sitio en el área de creación artística, con el trabajo Poética para el abulón (o de cómo vivir en el éxtasis sin morir en el intento). Los primeros lugares recibirán 50 mil pesos; los segundos, 30 mil, y los terceros, 15 mil pesos.
El premio Alejandrina fue instituido en 1985 con la finalidad de estimular la investigación en la entidad. Será entregado este miércoles en su vigésima edición.