Recobra el país un sitio en el máximo tribunal del orbe; estuvo ausente 32 años
Bernardo Sepúlveda, juez de la Corte Internacional de Justicia de La Haya
Nueva York, 7 de noviembre. El embajador y ex canciller mexicano Bernardo Sepúlveda Amor fue electo este lunes por la Organización de Naciones Unidas como juez en la Corte Internacional de Justicia en La Haya.
El nuevo integrante de la máxima autoridad legal mundial declaró que esto otorga a México "una posición destacada en el orden jurídico internacional", y señaló que es hasta más significativo, ya que es la primera vez en 32 años que México retorna a esta instancia (desde 1973). Por cierto, informó Sepúlveda, México no cuenta con un juez en ninguno de los tribunales internacionales, y ahora eso se cubre con esta posición en la máxima instancia de jurisprudencia mundial.
Acerca de la vigencia de la Corte Internacional en un contexto en que existe una guerra que el propio secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, reconoció como ilegal, donde Estados Unidos (EU) y otros poderosos actores no se someten a convenciones internacionales, sea sobre la tortura, derechos consulares de sus ciudadanos y más, Sepúlveda consideró que "en la enorme mayoría de los casos las decisiones de la Corte Internacional de Justicia se acatan y su cumplen" por los miembros de la ONU.
EU, indicó, tuvo que actuar recientemente en acatamiento del fallo del caso Avena, que ordenó conmutar la sentencia de muerte de seis mexicanos, y se están evaluando los otros 45 casos.
Recordó que hace unos meses el presidente de EU declaró que su gobierno cumplirá con la obligación que le impone la Corte. "Todo esto refuerza la confianza en un orden jurídico internacional que para países como México resulta fundamental para defender sus intereses esenciales", subrayó, con su fe en un régimen de derecho internacional aparentemente intacto.
Al mencionársele ejemplos de cuando Washington incumplió con los fallos de la Corte, como en el caso de Nicaragua, destacó que "se tienen que reconocer las realidades del poder" y cuando "un Estado no tiene intenciones de cumplir difícilmente puede ser sometido por la Corte Internacional". Pero insistió en que los fallos van creando precedentes que sirven de lineamientos jurídicos a la conducta de los estados. Tras reconocer que "no es un derecho perfecto", reiteró que "en la mayoría de los casos, la mayoría de los estados cumplen con la mayoría de las decisiones".
El periodo de Sepúlveda comenzará el próximo 6 de febrero y durará nueve años. Será uno de cinco nuevos jueces del total de 15 magistrados independientes que conforman la instancia judicial máxima del sistema de la ONU.
Sepúlveda fue electo con abrumador apoyo en la Asamblea General (158 votos del total de 189), y 12 (de los 15) miembros del Consejo de Seguridad, fruto de un intenso trabajo diplomático de México encabezado aquí por el embajador Enrique Berruga, representante permanente de México ante la ONU.
El diplomático fue juez ad hoc de la Corte Internacional de Justicia de La Haya durante el caso de los mexicanos sentenciados a muerte en EU, conocido como la decisión Avena, ganado por México. Ha sido miembro de la Comisión de Derecho Internacional de la ONU desde 1996.
Sepúlveda tiene una larga y distinguida carrera diplomática, legal y académica, y es recordado a escala mundial por su papel de fundador del Grupo Contadora, durante los 80, para buscar soluciones diplomáticas al conflicto en Centroamérica. También promovió la creación del Grupo de Río, otrora Grupo de los Ocho, conformado con Argentina, Brasil, Colombia, Panamá, Perú, Uruguay y Venezuela en 1987. Esto durante su gestión como canciller de México (1982-1988).
En el ámbito bilateral, Sepúlveda fue embajador en Washington, Londres y Dublín. Ha realizado diversas funciones en foros multilaterales, como la ONU y la OEA, y en asuntos de arbitraje y solución pacífica de disputas tanto en el ámbito internacional como en el nacional.
Fue presidente de la Comisión de Empresas Trasnacionales de Naciones Unidas (1980). También fue relator del grupo de trabajo responsable de elaborar un código de conducta para empresas trasnacionales.
Es profesor de derecho internacional público y de organismos internacionales en El Colegio de México desde 1967, institución de la cual es investigador asociado. Ha sido miembro del consejo editorial de Foro Internacional.
Entre otros galardones ha recibido el premio Príncipe de Asturias y el Simón Bolívar (por la UNESCO); también ha sido reconocido por su participación en el mundo académico y en el sector privado.
Preguntado por La Jornada si la guerra en Irak es ilegal, Sepúlveda respondió con todo su talento diplomático al señalar: "usted recordaba lo que decía Kofi Annan".