Empieza temporada obra de la coreógrafa y bailarina
Pilar Urreta rinde tributo al Centro Nacional de las Artes
La obra Campo abierto: los itinerarios de la fugacidad, de la coreógrafa y bailarina Pilar Urreta, comienza temporada este viernes a las 20 horas en la Escuela Superior de Música (ESM), del Centro Nacional de las Artes (CNA), a modo de homenaje al edificio diseñado por Teodoro González de León.
En un principio, la Compañía de Danza Pilar Urreta había planteado la obra en los espacios abiertos del CNA, lo que presentó dos problemas: uno, de orden técnico, por la cantidad de cables que había que desplazar, y otro, dado que la actual es una época en que hay muchas actividades en los jardines. Fue así como Urreta se acercó a Roberto Medina, director de la ESM, para consultarle la posibilidad de hacerlo allí.
''No fue un chiripazo -explica Urreta-, a este edificio he querido dedicarle un trabajo desde hace mucho tiempo, porque me parece una arquitectura poderosa, una obra maestra también en cuanto a riqueza escénica". Cada vez, agrega, ''me interesan menos los espacios tradicionales porque sólo alejan al espectador".
Campo abierto... se divide en varios actos performáticos: Tierra de cultivo, Limbo, Desprendimiento, Memorias alveoladas, Labyrinthus, Conversaciones con la sombra (Aprés Nietzsche), Respirar el tiempo y Vuelo crepuscular.
''Invitaremos al público (la entrada es gratuita y el cupo se limita a 30 personas) a realizar un recorrido por la ESM, de modo que cada sección de la obra ocurra en distintos espacios de su arquitectura", explica Urreta.
Con una hora de duración, la obra alude al tiempo, la memoria, los recuerdos, el olvido; las rutas que los individuos toman a lo largo de su vida, que la transforman, al igual que su manera de ver el mundo. También se refiere a los cierres de ciclo.
Cercanía con el intérprete y el movimiento
Jorge Chanona, intérprete de la obra junto con Rocío Flores, Jorge Saldaña y Andrea Vázquez, señala que con Campo abierto... Urreta celebra 35 años de trabajo profesional de la danza.
Aunque ese espectáculo es una pieza coreografiada, sin huecos para improvisar, necesita de la cercanía del espectador, para que ''no sólo experimenten la danza como la forma moviéndose, sino también como la sensación de cercanía con el movimiento y el intérprete".
Pero, ¿cómo se relaciona Campo abierto... con el conjunto de su obra? Urreta contesta: ''Plantea la ritualidad como una parte intrínseca de la danza. Luego, en el trasfondo del material hay una preocupación que existe en la mayoría de mis obras, que es la muerte. Es una obsesión en mi trabajo coreográfico.
''Otra preocupación recurrente ha sido hacer obra coreográfica itinerante. A principios de los años 90 hicimos La mulata de Córdoba en las cárceles de la Perpetua. Mi interés era tener al espectador cerca, no pasivo, sentado frente a un escenario, para que se fuera transformando por la arquitectura del edificio, por la atmósfera del inmueble húmedo y oscuro."
Campo abierto... se presentará los viernes 4 y 11 de noviembre, a las 20 horas, los sábados 5 y 12, a las 19 horas, y los domingos 6 y 13, a las 18 horas, en Río Churubusco, esquina calzada de Tlalpan.