El ministro del Interior "juega al vaquero": socialistas
Cuestionan represión policiaca en las protestas a las afueras de París
Ampliar la imagen Residentes del barrio Clichy Sous Bois, a las afueras de Par� se manifestaron el pasado fin de semana contra la represi�oliciaca y la muerte de dos adolescentes cuando hu� de la polic� Algunos llevaban playeras con la leyenda "Muertos por nada" FOTO Ap Foto: Ap
París, 31 de octubre. Dirigentes de la izquierda francesa acusaron hoy al ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, de hacer más mal que bien con sus declaraciones violentas y su política represiva sobre comunidades pobres de la periferia parisiense, luego de cuatro noches de enfrentamientos en la localidad suburbana de Clichy Sous Bois, en protesta por la muerte de dos adolescentes que huían del escrutinio policial.
Por cuarto día consecutivo, los choques entre policías y grupos de jóvenes -inmigrantes africanos y árabes, la mayoría- mantuvieron el clima de tensión en la zona norponiente de París, donde 70 automóviles han sido quemados.
Durante los enfrentamientos del domingo por la noche, una granada lacrimógena fue lanzada hacia el interior de una mezquita musulmana.
El hecho fue denunciado hoy por grupos comunitarios de la localidad y en respuesta Sarkozy reconoció "a medias" que la granada lacrimógena pudo ser lanzada por policías, según la edición en Internet del diario Liberation.
Las protestas del Partido Socialista Francés y de asociaciones comunitarias arreciaron hoy después que el ministro acudió a una de las comandancias (prefecturas) regionales de la policía, con el fin de exaltar la labor de los agentes de seguridad durante los disturbios.
"He venido a felicitar al personal de la policía por su sangre fría y su profesionalismo", dijo Sarkozy, presidente del partido Unión por la Mayoría Popular (UMP) y aspirante a la sucesión de su correligionario, el presidente Jacques Chirac, en 2007.
Los choques en Clichy Sous Bois comenzaron a raíz de que dos adolescentes que trataban de eludir a la policía, murieron electrocutados en una subestación de energía el pasado jueves por la noche. La identidad de los menores no fue revelada por las autoridades, pero vecinos afirman que se trata de hijos de inmigrantes africanos.
Los enfrentamientos ocurren a dos meses de los incendios en varios edificios ruinosos de comunidades pobres de la periferia parisiense. Sarkozy ordenó la evacuación de ese tipo de inmuebles y decenas de familias quedaron sin vivienda.
El ministro dijo hoy que mantendrá la política de "tolerancia cero" contra quienes cometen delitos.
Tras los disturbios del viernes, la policía detuvo a 13 jóvenes, ocho de los cuales fueron juzgados este lunes y condenados a penas de prisión de dos meses.
Laurent Fabius, del Partido Socialista, ex ministro y potencial candidato a la presidencia, censuró la respuesta violenta de Sarkozy y señaló que "necesitamos actuar en prevención, educación, vivienda, trabajo y no jugar al vaquero".