MEXICO SA
Remesas e ingresos petroleros, tablitas de salvación económica
Recursos enviados por migrantes rebasan presupuestos locales y programas asistenciales
Las rebanadas del pastel:
RESIGNADAS A MANTENERSE como únicas proveedoras de liquidez real para las finanzas públicas y el bienestar de millones de mexicanos, la actividad petrolera y las remesas familiares una vez más reportan cifras históricas y en los primeros dos cuatrimestre de 2005 ambas actividades inyectaron casi 28 mil millones de dólares netos que han permitido llevar la fiesta en paz.
EL BANCO DE México informó que de enero a agosto del presente año las remesas de la creciente paisanada en Estados Unidos sumaron 12 mil 956.3 millones de dólares, 18.1 por ciento más que en igual periodo de 2004, mientras que Petróleos Mexicanos precisó que en ese lapso la balanza comercial de petróleo crudo, petrolíferos, petroquímicos y gas natural reportó un superávit de 14 mil 667.9 millones, 26 por ciento mayor.
TAN SOLO EN agosto de 2005 la paisanada envió mil 976.5 millones de billetes verdes, un crecimiento de 23.6 por ciento con respecto al registrado en igual mes de 2004. Tres lustros después, el creciente número de mexicanos que labora en Estados Unidos en un mes envía un monto equivalente al que remitían en un año (en 1990 las remesas familiares sumaron mil 980 millones).
DE ACUERDO CON la información del Banco de México, poco más de 89 por ciento de las remesas se envió por medios electrónicos, cerca de 9.5 por órdenes de pago y el resto por transferencia directa. Existe un mayor control estadístico sobre este flujo de recursos, lo que permite ser puntual en el registro, pero lo que influye de manera determinante en el volumen de envíos es el creciente número de mexicanos que emigran al vecino país del norte.
POR LO QUE toca al renglón petrolero, la paraestatal reportó que en los primeros dos cuatrimestres de 2005 el monto de las exportaciones de crudo, productos petrolíferos, petroquímicos y gas natural sumó 19 mil 895.5 millones de dólares (36 por ciento de incremento con respecto a igual periodo de 2004), mientras el valor de las importaciones de refinados, petroquímicos y gas ascendió a 5 mil 227.6 millones.
LAS REMESAS FAMILIARES y el petróleo -con sus derivados- apuntalan una economía que parece ya no dar de sí. Sobre el particular, el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados señala que al cierre del segundo trimestre de 2005 el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos de México fue de 18 mil 900 millones de dólares, y este resultado fue reflejo del significativo aumento que registraron las exportaciones petroleras y del creciente ingreso de recursos al país por concepto de remesas familiares. El saldo negativo se originó por el déficit en las balanzas comercial, de servicios no factoriales y de servicios factoriales, así como por un superávit en la cuenta de transferencias.
EN DICHO PERIODO, el ingreso de recursos al país por concepto de remesas familiares ascendió a 5 mil 213.5 millones de dólares, incremento de 15.7 por ciento con respecto a igual periodo de 2004. El ingreso por remesas familiares acumuladas en el primer semestre de 2005 equivalió a 1.27 puntos porcentuales del producto interno bruto del periodo, superaron a los recursos provenientes de los viajeros internacionales que visitaron el país y representaron 65.5 por ciento del valor de las exportaciones de petróleo crudo en ese lapso.
LA CUENTA DE transferencias de la balanza de pagos en el segundo trimestre del año fue superavitaria en 5 mil 323.7 millones de dólares. El principal renglón de esta cuenta fue el de las remesas que personas de origen mexicano residentes en el exterior envían a sus familiares en México.
EN EL PERIODO que se reporta dichas remesas ascendieron a 5 mil 213.5 millones de dólares y representan el 8.2 por ciento del total de los ingresos de la cuenta corriente. Superaron a la inversión extranjera directa, cuyo flujo fue de 3 mil 370.4 millones. Asimismo, los ingresos por remesas familiares rebasaron en el trimestre los ingresos derivados de las exportaciones agropecuarias (mil 745.5 millones) y del renglón de turistas y excursionistas (2 mil 989.8), y representan 96.73 por ciento del superávit comercial del sector maquilador (5 mil 389.7).
EN EL PRIMER semestre del año las remesas acumuladas sumaron 9 mil 278.4 millones. Esta cifra superó en 17.8 por ciento a la registrada en el mismo periodo de 2004 y fue equivalente a 74 por ciento del valor de las exportaciones de petróleo crudo efectuadas en el periodo. Durante la primera mitad de 2005, el país recibió recursos que se originaron por 27.7 millones de transacciones de remesas familiares, con un valor promedio de 334 dólares. De continuar el mismo ritmo en la entrada de divisas por concepto de remesas familiares, el Banco de México estima que este año se captarían alrededor de 20 mil millones de dólares, con lo que se convertiría en el principal país receptor de esos recursos, incluso por arriba de la India.
EN EL PRIMER semestre del año, aun cuando todos los estados de la República Mexicana recibieron divisas, sólo seis entidades concentraron más de la mitad de las remesas familiares que se contabilizan: Michoacán, Guanajuato, Jalisco, estado de México, Distrito Federal y Puebla. En su conjunto esas seis entidades captaron 51.6 por ciento del total de las remesas que recibió el país.
DE HECHO, EN algunas comunidades de estos estados, los recursos que envían los emigrantes son varias veces superiores al monto de los ingresos propios estatales o al gasto asignado vía transferencias federales. Estos llegan a ser incluso superiores a los recursos destinados para la superación de la pobreza. Como los mexicanos sólo envían una fracción de su ingreso, ya que tienen gastos para vivienda y alimentación, la generación de riqueza que realizan fuera de nuestras fronteras es muy importante, misma que se pierde para nuestro país por no poderles ofrecer la oportunidad de trabajar en México.
LENTA, PERO SEGURA, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la autonomía jurídica, técnica, financiera y de gestión del INEGI, así como la creación del Sistema Nacional de Estadística, Informática y Geografía. Sólo falta que el Senado ratifique la decisión de San Lázaro.