Si hay disposición del IMSS, habrá acuerdo, afirma
Vega Galina se dice listo para reanudar pláticas
Esperan una gestión eficiente con Fernando Flores Pérez
El Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS) está listo para reanudar inmediatamente el diálogo con el nuevo director de la institución, Fernando Flores Pérez, aseguró el líder del gremio, Roberto Vega Galina, y dijo que aun cuando se demandó insistentemente la renuncia de Santiago Levy Algazy, la salida del funcionario no significa que haya "vencedores ni vencidos".
El dirigente, que se encontraba de gira por Villahermosa, Tabasco, cuando fue informado de la renuncia de Levy al frente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), señaló vía telefónica que no es el objetivo del sindicato considerar la dimisión del funcionario como triunfo, sino como la posibilidad de que ambas partes puedan encontrar una salida al conflicto y evitar la huelga emplazada para el próximo 15 de octubre.
El sindicato está en disposición de buscar mecanismos para fortalecer al IMSS, sin menoscabar la defensa de los derechos de los trabajadores, e incluso tiene un proyecto de reforma del régimen de pensiones, el cual Levy nunca quiso ni siquiera leer, porque no le interesaban los acuerdos sino mantener una política de enfrentamiento y confrontación y quiso resolverlo todo atacando el contrato colectivo de trabajo, sostuvo Vega Galina.
Desde su punto de vista, si hay disposición -aun cuando apenas queden 11 días para el estallamiento- y si hay voluntad de la dirección del instituto y el sindicato, se puede llegar a acuerdos, señaló.
Esto es, dijo, porque los trabajadores no son los que quieren ir a la huelga, como se ha querido hacer creer; al contrario, están en favor de encontrar acuerdos para asegurar la viabilidad del instituto a corto, mediano y largo plazos; tampoco quieren afectar a derechohabientes; pero sí buscan el respeto a sus prestaciones.
Ningún camino al diálogo
Hizo ver, sin embargo, que el sindicato se ha tenido que preparar para un eventual paro de labores en vista de que no había con Levy ningún camino al diálogo; el funcionario, según los trabajadores, había dejado de ser interlocutor. Durante años hubo un camino de discusión para negociar el contrato colectivo de trabajo, y estos procesos se llevaron a cabo sin alterar la prestación de los servicios del IMSS, pero la administración de Levy acabó con esta vía, la desconoció y le apostó a la descalificación y al ataque.
"La salud y seguridad social son derechos fundamentales de los mexicanos y el SNTSS no hará nada que ponga en riesgo estos derechos", advirtió el también diputado del PRI, y añadió que los trabajadores de manera reiterada han mostrado su disposición al diálogo, pero rechazan imposiciones o visiones unilaterales. Cada una de las partes, tanto la patronal como la sindical y el propio gobierno, deberán aportar y ceder en aras de dar viabilidad financiera a la institución.
Al referirse a las reformas promovidas el año pasado por la administración de Levy, expuso que se hicieron "de manera unilateral y autoritaria", sobre todo violando los derechos de los trabajadores, pero además resultaron ineficaces para mejorar las finanzas de la institución: todo empeoró desde su implementación.
El SNTSS nunca se ha cerrado a las reformas; incluso elaboró y sometió a la mesa de negociación una propuesta de cambio gradual del régimen de jubilaciones y pensiones, dentro de los márgenes razonables y que le dan viabilidad a largo plazo y fortaleza al Seguro Social. "Somos los principales interesados en fortalecer los servicios médicos, la infraestructura y el equipamiento hospitalario", por ello se ha demandado la contratación inmediata de las 17 mil plazas que han quedado vacantes de agosto del 2004 a la fecha; por ello la lucha permanente por mayores presupuestos y hasta la disposición a modificar el régimen de pensiones y jubilaciones, planteó el líder.
Defendió que es el sindicato el que no quiere que se acabe el Seguro Social, porque acabaría con su fuentes de trabajo, el patrimonio de los trabajadores del país, pero para que perdure la institución se requiere de una administración apta, eficiente y sensible a la situación general de los mexicanos y especialmente de los derechohabientes, la cual esperan encontrar con Fernando Flores Pérez.