Vuelve Joaquín Sabina a la música y la poesía

Estrena disco y, ya sin depresión, anuncia homenaje a Lázaro Cárdenas

ARTURO CRUZ BARCENAS

El cantautor español Joaquín Sabina regresa a la escena musical con una producción titulada Alivio de luto. El lanzamiento es significativo luego de la depresión que sufrió, "que no sabes cómo llega y cómo se va", declara a La Jornada en entrevista telefónica desde Madrid. Sobre el título del nuevo disco, precisa: "Es una vieja costumbre de nuestras abuelas: cuando se quedaban viudas se ponían de negro y cuando pasaban tres años se vestían ya con trajes más claros y se pintaban los labios; a eso se le llama alivio de luto".

Sabina participará en el concierto ¡Viva Cárdenas, muchachos!, que se realizará el próximo 7 de octubre en Madrid, donde se homenajeará al ex presidente mexicano Lázaro Cárdenas en gratitud por la acogida que dio a los exiliados españoles en los años 30 del siglo pasado. El artista opina: "En los trenes escapaban del franquismo, pero también había otros españoles que emigraron a Alemania huyendo de la miseria. Luego se exiliaron en México, donde los recibió Lázaro Cárdenas, a quien vamos a rendir tributo en unos días.

"Los españoles estamos absolutamente obligados a acoger bien a inmigrantes. En el homenaje estamos un grupo de gente como Joan Manuel Serrat, Víctor Manuel y Rosa de León, que llevamos meses planificando el homenaje para que las nuevas generaciones de hispanos y mexicanos sepan que estamos muy agradecidos con Cárdenas."

En este concierto participarán, además, los españoles Ana Belén y Miguel Ríos, así como los nacionales Astrid Hadad, Jaguares, Lila Downs, Maestros del Folklore Michoacano y Ely Guerra.

De vuelta a la charla, Sabina confiesa que se siente "estupendamente", y agrega: "Estoy metido ya en el vértigo de irme preparando para el escenario, ensayando con los músicos y haciendo promoción, algo que en siglos no hacía, pero me lo he tomado como una especie de gimnasia para calentar motores. En México estaré en marzo de 2006, pero en España comenzaremos a tocar a mediados de noviembre, pararemos en Navidad y después sigue Latinoamérica.

"He estado casi tres años sin subirme al escenario, sin agarrar una guitarra, bastante fuera del circuito de la música, pero he tenido la suerte de recuperar mi primera vocación, que era hacer libros, escribir sonetos, en lugar de ir a los bares de madrugada, donde están los rocanroleros. Ahora me reúno más con escritores, poetas, en casas particulares, y eso, la verdad, me ha gustado mucho, porque nunca pensé que iba a tener tiempo para desarrollar esa otra vida que quería de joven".

-Las letras requieren madurez...

-Por ese motivo el disco Alivio de luto ha salido más literario, más reposado. Primero porque he tenido más tiempo, luego porque últimamente estoy más rodeado de escritores que de músicos. Sí, supongo que el tipo de ritmos, de canciones, de cosas, es como siempre. Pero las letras son un poco más literarias.

-El tema titulado Pie de guerra, con letra y música de Leonard Cohen, ¿es un homenaje?

-Sí, tenía muchas ganas de homenajear a Cohen, que es uno de mis monstruos sagrados, además de que esa canción, que debe tener 25 años, siempre me pareció profética; me parecía que estaba describiendo no lo que había pasado, sino lo que iba a pasar, con lo que ha sucedido en estos dos o tres años: la catástrofe, la guerra de Irak, todo ese espanto... De pronto me vi alargando la canción de Leonard Cohen, barajando oposiciones, hablando de todo tipo de guerras internas y externas, y tal vez es mi preferida del disco.

En el material Alivio de luto, Joaquín Sabina también incluye dos cortes rancheros, Seis tequilas y Nube negra, a lo cual el español precisa: "Sí, México, inevitablemente, sigue apareciendo todo el tiempo en mi modo de cantar; tal vez porque en casa a diario escucho a José Alfredo Jiménez y a Chavela Vargas".

-Es un disco con poca instrumentación, en estado puro.

-Es muy de guitarras, que huye como de la peste del maquillaje de la producción. Sonoramente es muy humilde y tiene el ambiente que queríamos, que es como el de cuatro o cinco amigos reunidos tocando.

-Ha dicho que no quiere repetirse, ni entregar en cada disco una versión nueva de Princesa.

-Si yo acepto lo que los clubes esperan, al final van a acabar diciendo que me repito. Lo mejor es, cuando se escribe una canción, no pensar en el público. En éste hay que pensar cuando se sale al escenario, pero no cuando se está escribiendo.

-Un periodista español lo define como "el Dylan de los que no sabemos inglés".

-¡Ojalá! Creo que Dylan es un genio, quien llena toda la segunda mitad del siglo XX y todo lo que llevamos del XXI. Ese sí que se reinventa cada día a sí mismo. Me ha influido sobre todo en su modo de nombrar el caos. Me interesa y lo escucho con mucha frecuencia, pero no me considero Dylan para nada. Ya quisiera yo.

-Rinde homenaje a George Harrison, con Números rojos.

-No es explícito. Yo siempre fui más rollingstoniano que beatlemaniaco. En este disco, no sólo en las canciones que he entregado, que fueron 27, y sólo salieron 13, aparecen maromas beatles, y yo no sé por qué.

Su primera vocación

-Ha estado en lecturas de El Quijote de Cervantes y ahora está con el libro de Cartas en verso.

-Cartas en verso ya casi está acabado. Sólo estamos esperando un hueco para sacarlo, puesto que en los recientes años han ido apareciendo libros míos casi sin parar, desde el de las coplas satíricas que escribo en la revista Interview, y ahora sale una ampliación de Con buena letra, el cual incluye las canciones más recientes. Cartas en verso trae un capítulo bastante largo sobre México.

-Ahí habla sobre el subcomandante Marcos.

-Publico la carta que me mandó y hay unas cuantas décimas, no sólo las que publiqué en México, sino otras que he hecho posteriormente, y luego hay una crónica muy larga en endecasílabos, sin rima, sobre la entrada de los zapatistas al Zócalo; yo estuve ahí. Es un capítulo que se llama Un elefante cruza la frontera.

-En México hay una discusión sobre qué es ser de izquierda.

-Ser de izquierda es creer en los viejos ideales de la Revolución Francesa, de libertad, igualdad, fraternidad. Es estar en favor de la justicia y la solidaridad.

-A Pablo Neruda lo define como el mejor letrista del mundo.

-Me parece un poeta tan selvático que uno siempre tiene en la cabeza cuatro o cinco versos suyos. Creo que no hay una palabra en castellano que él no haya nombrado. Los libros de Odas elementales me parecen una cosa tan torrencial, tan maravillosa. Me gusta mucho, hasta el peor Neruda, hasta el Neruda más político, más cotidiano.

-¿Inclusive el que no es considerado de avanzada, por sus ligas políticas?

-Fue tan grande y tuvo tanto éxito en vida que se creó innumerables enemigos. Recuerdo cuando estábamos en la universidad, que había que ser de Neruda o de César Vallejo, pero yo era de los dos. ¿Qué le voy a hacer, si me gustan los dos?

-¿De los Machado con cuál se queda? Dicen por ahí: "yo me quedo con el bueno".

-¡Hombre! Yo me quedo con Antonio, pero tengo que reconocer que en el caso de Manuel la gente de mi generación no lo leyó porque se había quedado en España, fue franquista y todos lo considerábamos un traidor, pero ya pasados tantos años uno lo lee con bastante placer. Era un poeta estupendo.

-¿La importancia de El Quijote?

-Cervantes lo escribió para tener éxito, porque los que él consideraba sus buenos libros no lo habían tenido. Escribió un poco para burlarse de los libros de caballería. Sin embargo, fundó la novela moderna y dejó definido el carácter esencial del español. Me parece un libro genial, que se puede leer inclusive como si fuera de chistes.

-¿Qué le diría a los jóvenes para que lo leyeran?

-Que lean el capítulo de la segunda parte: El Quijote en Barcelona. No van a parar de reír.

-¿ Y de los versos satíricos, los cuales publica cada semana?

-He tenido una posibilidad de someterme a una disciplina. Todas las semanas, los miércoles, tengo que escribir sobre la actualidad más palpitante, y ahí cabe todo, desde el bote de basura, hasta las guerras o los terremotos, las catástrofes, o un recado a algún amigo. Eso mantiene con la pluma despierta.

-¿Va a poner énfasis en esta faceta literaria?

-He tenido la posibilidad de retomar mi primera vocación, de cuando tenía 17 años. Escribía y no cantaba. Me da mucho placer.

Estado absoluto de euforia

-Muchos lo quieren oír en discos, como en Alivio de luto.

-Es sólo una colección de canciones; es un capítulo más de mi biografía artística. Creo que es un disco tristón, introspectivo, pero refleja bastante veraz y fielmente lo que han sido los dos o tres años recientes de mi vida.

-¿Ya quedó atrás la depresión?

-Completamente. Ahora estoy en estado absoluto de euforia, porque estoy empezando a ensayar para el espectáculo. He aceptado hacer promoción y me encuentro activo y feliz.

-¿Fue la primera etapa depresiva de tu vida?

-Sí. Yo era de esos que creían que eso no me iba a pasar. Creo que estoy completamente curado. Lo peor de la depresión es que no sabes por qué viene ni cuándo se va a ir. Se va un día cualquiera. Luego, sí, queda un poquito de miedo de que vuelva, pero yo me encuentro perfectamente curado. ¡Es más! Estoy en una etapa de euforia.

-¿Cómo está España, políticamente?

-Es la primera vez en mi vida en la que no estoy radicalmente en contra de mi gobierno. El de Rodríguez Zapatero es un gobierno valiente que está tratando de ampliar las libertades civiles a extremos que molestan mucho a la derecha.

-Apoya el movimiento No a la guerra.

-Aquí ha habido un movimiento importante. Salieron un millón y medio de personas a la calle y luego hubo un movimiento de solidaridad que ya quisieran en Nueva Orleáns. Después de los atentados en Atocha se echó a patadas a un gobierno que estaba mintiendo. Fue muy emocionante.

-El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, reaccionó tardíamente con su gobierno ante el desastre provocado por un huracán.

-Me parece que estamos en manos de unos fundamentalistas analfabetos y que es muy peligroso ese gobierno del imperio.

-Es un viajero, un migrante. ¿Qué opina de gobernadores como Arnold Schwarzenegger, quien endurece medidas antimigrantes?

-¿Qué se puede esperar de ese tipo descerebrado? Sólo en Estados Unidos tipos como Reagan, Schwarzenegger o Bush, pueden llegar a donde han llegado. Yo estoy muy enfadado con la opinión pública de Estados Unidos, que por fin parece que está despertando un poquito, pero llevan años aguantando una cosa atroz.

-En Pájaros de Portugal, que está incluido en Alivio de luto, trata el tema de la migración.

-Estoy radicalmente en contra de las fronteras, de los pasaportes, de las banderas, de las aduanas. Creo que el planeta es la casa de todos y a nadie se le debería poner freno a su deseo de mejorar su vida, como en el caso de los trabajadores mexicanos.

-¿Cómo se encuentra de la garganta?

-Bien, estuve el otro día en el otorrino. Creía que tenía algún nódulo, pero no tengo nada. Lo que tengo que hacer es reducir el cigarrillo a lo mínimo.

-Llegó la hora de cuidarse.

-Sí, ¡maldita sea! Tengo 56 años y son los que tengo. Me encuentro perfectamente, inclusive he superado un incidente cerebral que tuve hace cuatro años. No tuve ninguna secuela, pero ya no puedo estar tres días sin dormir, como hacía antes.

"Cuando vaya a México espero darles un espectáculo que les caliente un poquito el corazón. Espero encontrar complicidad y que las nuevas canciones las reciban con oídos atentos y abiertos", concluyó Sabina.