Primera carta. Ai nomás, pasándola

Me preguntan que qué hay de nuevo en Huehuetla. No contesto como de costumbre, "nada". El día 9 de julio nos visitó una delegación de funcionarios del gobierno del estado de Puebla. Decidieron bajar a Huehuetla y hablar directamente con la Organización Independiente Totonaca (OIT), porque ésta ya lleva años pidiendo atención sin obtener resultados. La OIT dijo: "Para nosotros no vale el argumento de que son nuevo gobierno. Para nosotros hay un gobierno del estado y creemos que esté quien esté, debe atendernos como lo pregonan en sus campañas electorales, o les hacemos una marcha y los periodiqueamos porque lo que hacen es una burla constante. Siempre nos dicen que sí y nunca cuándo". Entonces dijo el gobierno: "¡No, espérate, mejor vamos a Huehuetla a platicar!".

Y el día 9 bajó a sudar la gota gorda el subsecretario de Gobernación, un señor Toxqui. También el licenciado Archundia que es el Subprocurador de Justicia del Estado; el representante de Oscar Aguilar González, del Instituto Poblano de la Vivienda, el representante del licenciado Pacheco Pulido del Tribunal Superior de Justicia, porque en Huehuetla tenemos un Juez Indígena aparte del Juez de Paz ordinario. También bajó el del DIF, el de la Secretaría de Desarrollo y Economía, el de Salud. En el caso de Educación, el secretario Darío Carmona comisionó a Eduardo Castañeda Domíguez de la CORDE 14 para ver el asunto.

Había ese día jueves como unos mil doscientos totonacos y totonacas en el local conocido como La Bodega, estaba lleno, pues, y también habia lleno de calor, algo así como 35 grados y los visitantes sudaban y no había botellitas con agua. Se mojaron los pañuelos y se "desmojaron" las glándulas sudoríparas. Se formaron mesas de trabajo y luego una plenaria y todo muy bonito. Que ahora sí, ya tenemos un diagnóstico y vamos a atender con premura este delicado asunto que es complejo y variado. Ya saben, el gobierno del estado es amigo de ustedes y no los dejará solos. Es más, nos volveremos a reunir el día uno de julio para 'afinar' los paquetes de atención.

Entonces un compa que habla castilla les dijo: "Pues diculpen que nos les damos ni agua, y disculpen que les digamos, pero nuestra palabra tiene que ser clara como nos han enseñado nuestros abuelos. Nosotros como totonacos hemos sido pacientes y hemos sido respetuosos, y cuando nos promete el secretario de Gobernación que hablará con nosotros y luego, a la mera hora nos manda a un representante, pues sí, hablamos con él pero nos dice que vamos a ver, porque él no puede decidir y tiene que decirle a su jefe.

"Pues nosotros no hemos hecho como otros hermanos de otras regiones, que con toda dignidad le dicen: 'Dijo el secretario que él iba a hablar, pero si no tiene tiempo entonces no vamos a hablar contigo, porque así no está respetando su propia palabra'. No, nosotros si escuchamos al representante. Pero ahí está el resultado: NADA. Sin embargo les decimos que nosotros queremos LA PAZ, y queremos LA JUSTICIA, y queremos la DEMOCRACIA verdadera y por eso somos respetuosos. Por eso queremos continuar este diálogo con el mero gobierno del estado. Porque ya nos ha pasado muchas veces que vamos allá a Puebla y nos dicen: 'No se preocupen, díganle a su presidente municipal'.

"Entonces regresamos aquí al pueblo y le decimos al presidente que nos ayude, y nos contesta que sí, que cómo no, que hagamos nuestro proyecto y que juntemos el expediente y que sea luego. Nosotros obedecemos y se va el paquete y el gobierno manda la ayuda, pero el presidente municipal no la entrega a los que la pedimos, sino que le da el apoyo a gentes que tienen casa y tienen salud y tienen todo y no necesitan nada. Pero eso sí, cuando el gobierno manda a cobrar la devolución del dinero, la cuenta llega a nombre de los miembros de la OIT que nunca recibieron nada. Por eso ya no queremos que el trámite sea a través del presidente municipal, sino directamente con el gobierno del estado".

Y los señores dijeron que eso estaba muy bien, que así se va a hacer.
 
 
 

Segunda carta. Donde la oit dice que se está cansando

Hace más de un año, Abundio Esteban Gaona firmó un convenio en el que se comprometió a gestionar y a entregar mil 500 paquetes de lámina galvanizada a igual número de solicitantes totonacos de la OIT. Al término de su gestión como presidente municipal las láminas llegaron pero fueron entregadas selectivamente en perjuicio de los oiteros. De 14 láminas que debería contener el paquete, según el honorable convenio, solo les entregaron cinco láminas por paquete. Ahora se le pide al gobierno estatal que entregue esos paquetes y se cumpla el compromiso contraído por el gobierno municipal, pero Puebla dice que solo dará 700. Esto lo afirmó el gobierno del estado el lunes 4 de julio, ya que la reunión programada para el día primero fue pospuesta. En esta reunión también dijeron que de otros 76 paquetes que no entregó el gobernador Melquiades Morales, sólo entregarán trece.

Asimismo, de 55 apoyos para Piso Firme, el gobierno dice que sólo los entregará si los interesados pagan 534 pesos por paquete, cantidad que debería pagar el presidente municipal, pero que aquí, obviamente, la oit no cuenta con él. Los solicitantes dicen: "Pues estoy solicitando apoyo porque no tengo dinero, si tuviera no estaría pidiendo". Además, no vamos a recibir esas migajas, porque no estamos pidiendo limosna sino apoyo dignificativo. Nuestras casas están goteando por dentro.

Con este panorama, se calientan los ánimos. El gobierno se sigue burlando de nosotros. Es cierto aquello de que los mejores indios son los que están muertos, porque no dan problemas. La Asamblea dice que tal vez tenemos que decidir hacer el plantón en la capital para que la opinión pública sepa que aquí estamos y estamos marginados, y que el gobierno nomás se ríe. Ni modo. Ya veremos.
 
 
 
 

Posdata. Se avecina otra visita de los funcionarios

Vienen a visitar a la OIT y al Juzgado Indígena funcionarios de Semarnap el viernes 15 de julio. La OIT está preocupada porque el poder judicial está actuando con una ley que castiga a la gente que está podando sus cafetales o los árboles de lindero, o los árboles que dañan a la milpa y sirven para leña. Pero esa ley prohibe cortar árboles en aras de la justicia contra la tala inmoderada, así que los campesinos van a la cárcel por realizar trabajos para procurar sus cultivos y la alimentación de sus familias. Es evidente que esa ley fue una imposición y fue escrita sin la participación consciente de los pueblos indígenas, con ignorancia, pues. Hasta el Agente Subalterno del Ministerio Público (priísta) tuvo que pagar su multa porque en su rancho su empleado fue detenido cuando podaba unos árboles.

Nosotros sabemos por qué cortamos los árboles, porque así conviene, y esos árboles se recuperan en poco tiempo. No vendemos carros llenos de madera como lo hacen los luwanes (mestizos).

De eso se va a tratar la reunión con los funcionarios. A ver si nos ponemos de acuerdo.

Luego vendrán otros temas porque la injusticia es como la neblina, se mete hasta debajo de la cama y hace que las cosas se pongan verdes, y eso se quita sacándolas al sol y dándoles una sacudida.