Descubren europeos un quasar que desconcierta a los astrofísicos
París, 14 de septiembre. Un grupo de científicos europeos ha descubierto un extraño quasar que, al contrario de lo habitual, no se encuentra en el centro de una galaxia masiva, por lo que podría revolucionar los conocimientos que la astrofísica tiene de estas especies de estrellas superluminosas.
Según publica en su número del jueves la revista científica Nature, el extraño quasar fue descubierto en octubre de 2004 por un grupo de investigadores europeos que observó que el objeto está en el borde de una pequeña nube de gas, de forma que podría encontrarse en el seno de una galaxia formada casi totalmente por materia negra.
Observados por primera vez en 1962, los quasares son una especie de cuerpos celestes de pequeño diámetro, que se encuentran a distancias muy lejanas y están dotados de una considerable velocidad de alejamiento.
Considerando la distancia y su luminosidad, son objetos con una energía extrema.
Los astrofísicos estiman que se trata de núcleos de galaxias muy activas y su actividad se debe con toda probabilidad a la presencia, en el centro de las galaxias que los cobijan, de un agujero negro supermasivo.
Sirviéndose del telescopio espacial Hubble y el telescopio gigante del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Chile, Pierre Magain, de la Universidad de Lieja (Bélgica) y un grupo de científicos estudiaron simultáneamente un total de 20 quasares relativamente cercanos.
Según dicho estudio, 19 de ellos se encontraban, como los científicos habían previsto, en el centro de una galaxia supermasiva. Por el contrario, el vigésimo, al que se denominó HE 0450-2958 y que está situado a 5 mil millones de años luz de la Tierra, no se encuentra en el corazón de ninguna galaxia supermasiva, sino en el borde de una especie de nube de gas.
De esta forma, según los científicos, en caso de que exista una galaxia alrededor de este extraño quasar, su luminosidad es al menos seis veces menor que la normal, visto el brillo del propio quasar y el tamaño del agujero negro que está asociado a él.
Afp