El procurador estatal rechaza que la muerte de Octavio Acuña haya sido por intolerancia
Critican la ineptitud policiaca ante el asesinato de activista gay en Querétaro
Los homófobos deben ser tratados clínicamente, recomienda Hugo Gutiérrez Vega
Ampliar la imagen "La diversidad fortalece la democracia", se expres� la mesa redonda celebrada ayer en Quer�ro. En la imagen de archivo, Regina Orozco, reina de la diversidad sexual en 2003, tras la marcha en pro de la igualdad de derechos para todos, en la Plaza de la Constituci�OTO Roberto Garc�Ortiz Foto: Roberto Garc�Ortiz
Querétaro, Qro. En el esclarecimiento del asesinato del activista queretano Octavio Acuña la justicia brilla por su fatal ausencia, lo que muestra la ineptitud, parcialidad y exceso de prejuicios imperantes en la procuración de justicia del estado, manifestó Hugo Gutiérrez Vega, director del suplemento La Jornada Semanal del periódico La Jornada.
Al participar en la mesa redonda Diversidad sexual, intolerancia y discriminación, efectuada en las instalaciones de la Universidad Autónoma de Querétaro, mencionó que la homosexualidad es una conducta tan normal como la heterosexualidad, pues el sexo no sólo sirve para la reproducción de la especie, sino también para el placer y la comunicación con los demás. El 21 de junio, Acuña fue apuñalado en la condonería en la que impartía talleres de prevención de VIH/sida.
Gutiérrez Vega, también ex rector de esa casa de estudios, criticó la postura adoptada por la jerarquía católica, que recientemente calificó, en voz del obispo local Mario de Gasperín, de perversa la homosexualidad, no obstante que organismos científicos mundiales la retiraron de sus catálogos de enfermedades mentales. "Es una muestra de conservadurismo, pero, sobre todo, de una crueldad de estirpe inquisitoria" consideró.
Fue en el auditorio Fernando Díaz Ramírez del campus universitario donde Gutiérrez Vega declaró a los asistentes su asombro "por las manifestaciones de intolerancia que ni siquiera pueden calificarse de medievales, pues la Edad Media tuvo muchas veces sus momentos de jubilosa carnalidad".
Señaló que quienes deben ser objeto de observación clínica son los discriminadores, los misóginos, los perseguidores de homosexuales y los que propician dichas conductas al calificar de perversión a una preferencia sexual y legítima. Lamentó que la Iglesia católica aún tenga gran incidencia en la sociedad queretana, a la que definió como conservadora. "El oscurantismo viene del Episcopado, no es posible que sus líderes digan tales cosas en pleno siglo xxi."
La homofobia, problema, pero también enfermedad
En el marco de las actividades que diversas organizaciones civiles nacionales e internacionales realizan para presionar a las autoridades estatales para esclarecer el crimen del activista por los derechos de la comunidad gay Acuña Rubio, el coordinador nacional de la Red Democracia y Sexualidad, José Aguilar Gil, destacó que la homofobia es un problema, pero también una enfermedad, porque daña a la sociedad y a la persona que la padece.
Planteó que el respeto a la diversidad fortalece la democracia, pues se respetan derechos humanos, sexuales y reproductivos. "La homofobia tiene una cura emocional relacionada con procesos personales; el homófobo tiene que reconocer y aceptar sus núcleos homosexuales para poder convivir con los demás de manera respetuosa."
En el panel también estuvo William Smith, vicepresidente del Consejo de Educación e Información sobre Sexualidad de Estados Unidos (Siecus), quien en entrevista con NotieSe aseveró que en su país la homofobia está en todas partes; sin embargo, destacó el incremento en los niveles de tolerancia y aceptación en la sociedad.
Al referirse a la postura de los partidos políticos respecto al tema, el especialista en políticas públicas externó que desde hace años la plataforma demócrata considera que los homosexuales deben tener iguales derechos, mientras para los republicanos los gays no deben tener derecho a adoptar niños o casarse. "Los demócratas tienen una posición de que los homosexuales, al igual que los heterosexuales, tienen derechos, y los republicanos dicen que no debe haber derechos especiales", indicó.
En cuanto a los avances producidos en las pesquisas sobre el asesinato de Octavio Acuña, Bernardo Romero, ex presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Querétaro, dijo a esta agencia que hasta el momento han sido nulos, pues el procurador de justicia del estado, Juan Martín Granados Torres, no contempla la posibilidad de que se haya tratado de un caso de agresión por homofobia.
Una semana antes, al finalizar una conferencia en el Centro Cultural Manuel Gómez Morín, de Querétaro, Acuña relató el acoso homofóbico que padecía, reveló públicamente la negativa de la Comisión Estatal de Derechos Humanos a aceptar sus denuncias, y expresó su temor a posibles agresiones.
Romero Vázquez, integrante del Centro de Derechos Humanos Fray Jacobo Daciano, mencionó que gracias a las acciones emprendidas por Amnistía Internacional las autoridades queretanas han recibido aproximadamente 400 cartas de organizaciones civiles nacionales e internacionales mediante las cuales exigen el pronto esclarecimiento del crimen de Acuña. "El asesino de Octavio tiene dos cómplices: la impunidad con la que actúan las autoridades y que cubre a los agresores, y la intolerancia que domina en la entidad", finalizó.