Pese a revelaciones no hay bases jurídicas para ello, trasciende en la SIEDO
La PGR "no quiere ni puede" atraer investigaciones sobre el caso Stanley
Corresponde a la procuraduría de justicia del Distrito Federal seguir las pesquisas
La Procuraduría General de la República (PGR) no cuenta con elementos para empezar o atraer las investigaciones del caso del conductor de televisión Francisco Stanley, asesinado el 7 de junio de 1999 afuera de un restaurante ubicado al sur del Distrito Federal.
A pesar de las revelaciones del director del semanario Zeta, Jesús Blancornelas, el pasado viernes, de que el también actor fue ejecutado por orden del cártel de los hermanos Arellano Félix como parte de un conflicto entre bandas de narcotraficantes, por el momento la dependencia federal "no quiere ni puede" encargarse de dichas pesquisas.
Funcionarios de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la PGR afirmaron a La Jornada que hasta el momento "no existe ninguna base jurídica para que el asunto pase a jurisdicción federal".
Manifestaron que, en todo caso, corresponde a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) continuar las pesquisas y determinar si se cumplen los supuestos legales para solicitar a la PGR que atraiga la indagatoria, ante la nueva hipótesis relacionada con el narcotráfico.
Incluso, agregaron las fuentes consultadas, la dependencia federal ni siquiera ha iniciado un acta circunstanciada relativa a la información de la nota periodística. "La PGR no quiere ni puede por el momento hacerse cargo de la indagatoria (sobre el caso Stanley), ya que es de competencia exclusiva de la procuraduría capitalina."
No es la primera vez que se habla de que el homicidio estuvo relacionado con asuntos del narcotráfico; de hecho, una de las líneas de investigación que siguió la PGJDF durante los días posteriores al crimen fue que la víctima estaba vinculada con el cártel de Juárez, que entonces encabezaba Amado Carrillo Fuentes, El señor de los cielos.
La reciente información de Blancornelas sostiene que uno de los sicarios que contrataron los Arellano Félix para ultimar al conductor fue capturado en el norte de la República por su presunta participación en otro acto delictivo, y que en abril de 2004 logró darse a la fuga de un penal de Tijuana con el apoyo de un grupo de sicarios.
Los funcionarios consultados revelaron que si bien el procurador del Distrito Federal, Bernardo Bátiz, indicó que el expediente podría ser atraído por la PGR en cualquier momento, "eso no puede ocurrir si las autoridades capitalinas no obtienen elementos sólidos que refuercen la hipótesis de la ejecución de Stanley por venganzas del narcotráfico".