Reunión de legisladores
Exigen no criminalizar la migración
Tijuana, BC, 27 de agosto. La 11 Conferencia Legislativa Fronteriza (CLF) se pronunció en contra de la propuesta de "criminalizar la migración indocumentada", tal como planteó el congresista republicano por Arizona, Ray Barnes, quien de esta forma intentó condicionar su apoyo para que se prohíba a grupos civiles hacer labores de vigilancia en la frontera.
Al concluir los trabajos de la CLF, legisladores de México y Estados Unidos suscribieron una declaración conjunta en la que exhortaron a los gobiernos de ambos países a agilizar las negociaciones para crear un acuerdo migratorio y de seguridad que permita mayor control de la migración ilegal. También se acordó exhortar al retiro de los cazamigrantes en la región de la frontera.
Los representantes populares de ambas naciones criticaron a George W. Bush por permitir la proliferación de grupos como la organización Minuteman Project.
Sin embargo, pese a la oposición de sus colegas de California, Nuevo México y Texas, el senador Timothy S. Bee, también republicano por el estado de Arizona, respaldó la postura de Barnes, por lo que ambos decidieron no firmar el documento final sobre el tema migratorio y seguridad fronteriza, argumentando que los civiles estadunidenses tienen la obligación de cuidar la frontera y su propiedad ante la presencia de indocumentados.
Apoyo a programas que faciliten el movimiento legal de personas
En tanto, los legisladores ofrecieron su apoyo a programas que faciliten el movimiento eficiente y legal de personas y bienes en la región fronteriza.
De esta forma plantearon a las administraciones de ambas naciones que mientras se llega a un acuerdo en materia migratoria se instrumente en los estados de la frontera sur de Estados Unidos el programa de trabajadores huéspedes, lo que permitiría facilitar la migración legal de beneficio mutuo.
"Las dependencias de seguridad pública federal y estatal de Estados Unidos y México deben tratar con respecto y dignidad a los migrantes sobre la base de sus respectivas leyes o acuerdos internacionales, especialmente los derechos de los menores", agregan en el manifiesto.
Durante el encuentro legislativo, los participantes abordaron además temas de interés fronterizo como la problemática del canal Todo Americano, la instalación de plantas almacenadoras de gas natural, migración y seguridad fronteriza.
En este último punto decidieron pedir a sus respectivos gobiernos mayor apoyo para garantizar la seguridad en la zona, además de que trabajen en un acuerdo migratorio que disminuya el problema de la migración indocumentada y todas sus consecuencias. También acordaron exigir a Estados Unidos que mejore las condiciones de repatriación de menores indocumentados.
El encuentro duró tres días e intervinieron representantes de los estados de Sonora, Baja California, Baja California Sur, Tamaulipas, Chihuahua y Nuevo León, mientras que por el lado estadunidense participaron congresistas de Arizona, Texas, California y Nuevo México.