Aún no explica su actuación en el tema de los acuerdos de San Andrés: Díaz Polanco
El PRD, en deuda con indígenas, destaca experto
Morelia, Mich., 27 de agosto. Los derechos humanos, políticos y culturales de los indígenas no son cabalmente garantizados por el Estado, o simplemente no existen, afirmó Margarita Nolasco, escritora y especialista en el tema, durante el foro Hacia un proyecto de nación al 2006, organizado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
La escritora señaló que en el país prevalecen conductas discriminatorias hacia los nativos, el sistema judicial no considera que tienen otra lengua, están sujetos al trabajo esclavista, los servicios de salud y educación son insuficientes y deficientes, es poco respetada su cultura y son negados sus derechos colectivos.
En este foro, que abordó el tema de derechos y cultura de ese sector poblacional, la autora de los libros Oaxaca indígena y Migración indígena comentó que después del levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, el Estado mexicano vio a las etnias de Chiapas como un problema de seguridad nacional.
No obstante, subrayó, los pueblos indios han descubierto su potencialidad y se han politizado, por lo que se preguntó si los partidos políticos "están preparados para hacer frente a esta nueva condición indígena".
En esta reunión, realizada en el Centro de Convenciones de la capital michoacana, la representante del pueblo purépecha y nominada al Premio Nobel de la Paz, Guadalupe Hernández Dimas, indicó que en el concepto más amplio de cultura, las dependencias gubernamentales deben entender que los pueblos indios tienen rasgos y manifestaciones propios, que deben respetar, por lo que sólo tienen que propiciar la creación y consolidación de espacios culturales, pero corresponde a los indígenas crear y recrear la cultura de sus pueblos.
En tanto, el coordinador de Nación Purépecha, Abundio Marcos Prado, señaló que esta organización no estuvo de acuerdo con la iniciativa que presentó el gobernador del estado a la anterior legislatura, no sólo porque no incluyó los acuerdos de San Andrés, sino porque no se tomó en cuenta a las comunidades y sus organizaciones.
Por su parte, el diputado federal Javier Manzano Salazar consideró -en un texto leído por un colaborador- que la transformación de fondo de la situación de los pueblos nativos depende del cambio del Estado y la sociedad mexicanos en su conjunto. "El PRD debe impulsar el acceso de las comunidades a la representación que les corresponde y ser el primero en garantizar que en los distritos de mayoría indígena, recientemente reconocidos por el Instituto Federal Electoral, haya candidatos nativos", subraya el documento.
El partido del sol azteca tiene el compromiso de explicar su actuación en los acuerdos de San Andrés, es decir, tiene una deuda con los pueblos indígenas, ya que su votación, tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores, en abril de 2001, marcó un tropezón a los contenidos que se plantean en el partido, indicó Héctor Díaz Polanco, especialista en asuntos indígenas y autor de libros sobre el tema.