El delegado de Cuajimalpa ante diputados locales
Preocupa, pero nada se puede hacer para frenar invasiones de barrancas
El jefe delegacional de Cuajimalpa, Ignacio Ruiz López, reconoció ayer que el crecimiento de grandes desarrollos inmobiliarios en barrancas de esa demarcación "es muy preocupante", pero dijo que no se han podido frenar, pues se basan en licencias de construcción otorgadas por administraciones delegacionales pasadas.
Al comparecer ante la Comisión de Atención y Quejas Ciudadanas de la Asamblea Legislativa, el funcionario se deslindó de cualquier responsabilidad derivada del asentamiento de lujosos condominios o residencias en esas zonas de conservación, como lo reseñó ayer La Jornada.
Inclusive, dijo a los diputados que determinadas autorizaciones a proyectos dependen también de las secretarías de Desarrollo Urbano y de Medio Ambiente, y no sólo de la autoridad delegacional.
Citó que en el caso de la construcción que se localiza en la calle Bosques de Canelos, que se extiende sobre la ladera de la barranca El Zapote, fue una licencia que se expidió el 6 de enero de 1988, cuando gobernaba la demarcación Jenny Saltiel. "Entonces, no es responsabilidad de nuestra administración".
Del conjunto residencial Obelisco, que también está en esa misma barranca, dijo que la licencia se otorgó en agosto de 1991, en la época del PRI, y en el caso del fraccionamiento residencial La Punta, en Bugambilias 401, precisó que también obtuvo la licencia correspondiente, pero que por el momento se está verificando la legalidad de la misma y en los próximos días se dará una resolución.
Respecto del condominio conocido como El Servilletero, en la barranca Milpa Vieja, adujo que su licencia se liberó en octubre de 2000, ya con el delegado panista Francisco de Souza; y que del proyecto Dos Torres Bosques, que se edifica en la ladera de la barranca La Diferencia, se vienen promoviendo prórrogas desde 1994".
Ignacio Ruiz dijo que la expansión de las inmobiliarias en las barrancas "es un tema preocupante, muy preocupante", pues rebasaron ya la capacidad de la infraestructura que se tiene en esta demarcación, por lo que pidió la intervención de las autoridades del gobierno central para enfrentar esta problemática.
En su comparecencia, el delegado fue cuestionado por los diputados del PRD Araceli Vázquez Camacho y JorgeLara del PAN, por el grave deterioro que esos y otros desarrollos están provocando en esas zonas de conservación.
La legisladora comentó en entrevista que uno de las principales causas que impide frenar la expansión es que no se conoce a ciencia cierta la situación de las barrancas en Cuajimalpa: "en un tramo tienen un nombre y en otro tramo cambia; se carece de un censo preciso y menos aún de acciones de control, entonces si no existen detalles a una problemática cómo pensar en enfrentarla adecuadamente".
Consideró que al depender de varias instancias, como Seduvi y Medio Ambiente, los permisos o licencias para proyectos inmobiliarios en la zona y estar desconectadas esas secretarías con las autoridades delegacionales "se genera una fuerte discrecionalidad, e incluso corrupción, y es el resquicio por donde se meten los empresarios y obtienen avales para construir".
Por ello propuso que se integre un comité interinstitucional con autoridades del gobierno central, delegacional, e incluso federal, además de una representación de vecinos, y se tomen las determinaciones que correspondan a permisos a desarrolladores.