Laboraban para empresas subcontratadas en la ampliación de la terminal aérea
Liquidan a trabajadores que exigían el pago íntegro de su salario en el AICM
Ampliar la imagen Obras de ampliaci�e la terminal uno del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de M�co FOTO Luis Humberto Gonz�z Foto: Luis Humberto Gonz�z
Al presumir que ninguna autoridad intervendría en favor de los trabajadores que laboraban en la ampliación de la terminal aérea capitalina -quienes a principios de esta semana protestaron porque no les habían pagado de manera íntegra los salarios devengados desde hace 15 días- las compañías constructoras subcontratadas por Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) y el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) despidieron a "los alborotadores" y sólo les pagaron una parte de su salario, quedándoles a deber el resto de sus honorarios.
Los despidos injustificados comenzaron ayer por la tarde. De los 82 asalariados inconformes, identificados durante una reunión con el director general del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), Héctor Velázquez Corona, fueron cesados a 23, algunos de los cuales dijeron a La Jornada que sólo les habían cubierto una semana y que el resto se los darían ayer, lo que no ocurrió, y ya no se les permitió ingresar al área de trabajo.
El resto, entre 60 y 70 operarios, fueron liquidados ayer por la tarde, y también sólo les pagaron parte del adeudo. Hay casos de soldadores, operadores de maquinaria pesada, tablarroqueros y colocadores de las láminas de la nave cóncava del último tramo del área nacional (donde se trabaja a más de 30 metros de altura sin cinturón de seguridad), que esperaban recibir entre 15 y 20 mil pesos por persona que se les adeudaban, sólo recibieron entre 5 y 6 mil pesos, según dijeron.
Ninguna autoridad del AICM ni de ASA se presentaron. Representantes de las compañías subcontratadas: ORI, Constructora R8 y Construcciones y Acabados, entrevistados por La Jornada, dieron su versión sobre lo que ocurría. Eludieron confirmar que los más de cien trabajadores que a principios de semana llevaron a cabo un paro de labores, exigiendo que les pagaran sus salarios pendientes, estaban siendo despedidos.
El ingeniero José Antonio Rangel, representante de R8, responsable de los trabajos de ampliación de la última parte del ambulatorio principal del área nacional, dijo: "no se está despidiendo a nadie. Lo que sucede es que, como en toda obra, cuando se termina una parte se liquida a la gente que ya no es necesaria. Pero eso no quiere decir que estemos corriendo a la gente".
Por su parte, el ingeniero Hermelindo Cruz Reyes, de Construcciones y Acabados, aceptó que ya sólo tenía consigo trabajando a un sobrestante. Y se negó a decir cuánta gente dio de baja. A este constructor, más de 12 trabajadores lo señalan como uno de los empresarios que no ha cubierto los salarios devengados. Otros contratistas se negaron a ser entrevistados.