''Donde estoy hay cultura alemana'', decía el autor de La Montaña Mágica
Hace 50 años falleció Thomas Mann; preparan sus obras completas en 38 tomos
Con su coterráneo Goethe, es uno de los narradores alemanes más estudiados
Alerta Grass sobre el sensacionalismo que rodea la homosexualidad del Nobel de 1929
Ampliar la imagen El escritor Thomas Mann (1875-1955), en su estudio FOTO Archivo Foto: Archivo
Luebeck, 10 de agosto. ''Una idea o una experiencia mía pasará con fama de boca en boca", vislumbraba en su juventud el controvertido escritor Thomas Mann, quien es recordado con motivo de su 50 aniversario luctuoso.
En vida, el autor nacido en Luebeck el 6 de junio de 1875, fue objeto de apasionada reverencia de sus admiradores, pero también de repudio. No obstante recibió el Premio Nobel de Literatura en 1929, consagrándose como uno de los grandes narradores alemanes de siglo XX.
Su trabajo como escritor fue fenomenal, pues en más de 60 años de producción literaria llenó más de 100 mil páginas, pero cuando apareció su primera novela, Los Buddenbrook, en 1901, que lo llevó a la fama mundial, le llovieron severas críticas.
Muchos años después, Thomas Bernhard afirmaba: ''El gran burgués Thomas Mann escribió literatura pequeñoburguesa de punta a punta". Las críticas eran algo que el escritor no soportaba y solía afirmar que le ''provocaban náuseas".
Y esas críticas se debían a su estilo de narrador de profundo contenido sicológico, con divagaciones y frases complementarias. Por ello sus obras no son fáciles de leer. Pero hasta hoy sigue siendo el favorito de los germanistas y junto con Goethe el escritor alemán más investigado.
''Donde estoy yo, hay cultura alemana" era una frase favorita de Mann en el exilio, cuando debió huir del régimen nazi rumbo a Estados Unidos.
Su viraje de admirador de la monarquía a defensor de la república, su huida al exilio, al principio prácticamente en contra de su voluntad, y su negativa a volver a Alemania después de la guerra, forman parte de su cambiante vida y biografía.
''El más alemán de todos los alemanes''
Fue el ''más alemán de todos los alemanes", sentenció el famoso crítico Marcel Reich-Ranicki, quien cree que al igual que en Goethe, subestimó que Mann era un ser erótico, que tenía al sexo como motivo central de sus creaciones.
Pero, sobre todo, Mann fue un homosexual, como insinúa en sus obras Muerte en Venecia, Tonio Kröger y Félix Krull, dijo el crítico.
Mientra otro Nobel, Günter Grass, dijo: ''No comparto sin más lo del papel destacado de Thomas Mann como individuo en la literatura del siglo XX. Nuestra literatura fue muy rica hasta el nazismo y en lo referente a los migrantes también más allá de esa fecha.
''Creo -continuó- que es sensacionalismo cuando se declara a Mann como una persona extraordinaria. Es injusto cuando algunos críticos, para alabar a Mann, arremeten contra Heinrich Mann. Thomas Mann no merece que se le destaque de manera exagerada."
Y a eso, dijo Grass, se le debe añadir una cosa: ''que después de la publicación de sus diarios, algo que no hubiera sido su voluntad, fue su homosexualidad latente y no vivida, la cual ha pasado a primerísimo plano. Con ello surge el peligro de que la verdadera obra de Mann quede oscurecida por ese sensacionalismo''.
Será hasta 2015 cuando esté lista la primera colección de obras completas de Mann, en 38 volúmenes.
Thomas Mann murió en Zurich, Suiza, el 12 de agosto de 1955 debido a una crisis cardiovascular. Ese día, "el mundo entero recibió la noticia de su muerte" como reza la última frase de Muerte en Venecia.