Un hombre de 486 kilos ya perdió la mitad de peso
El bypass gástrico se mira en EU como alternativa contra la obesidad
Nueva York, 2 agosto. Patrick Deuel, de Valentine, en Nebraska, estaba en camino de sufrir una muerte lenta pero segura. A sus 43 años pesaba 486 kilos y era una de las personas más gordas del mundo.
Sufría diabetes y era demasiado grande para poder sentarse o moverse en la cama. Después de una operación de reducción de estómago, que cada vez tiene más fama entre los gordos de Estados Unidos, Patrick Deuel pesa hoy la mitad. Ya no está condenado a la cama y ha dado los primeros pasos ayudado por muletas. Relata maravillado que puede volver a verse los huesos de la mano.
La soprano y exitosa Deborah Voigt perdió 50 kilos en una operación realizada en Nueva York. Igual que Deuel se sometió a una intervención denominada en Estados Unidos bariatric surgery o bypass gástrico, que le redujo el estómago al tamaño de un rotulador, y a la vez también se realizó otro bypass (desvío) en una parte de su intestino para reducir la absorción de alimentos.
Ahora sólo puede comer pequeñas porciones, afirma Voigt, quien tuvo problemas de obesidad desde niña y ha pasado durante años por innumerables dietas.
Un año después lleva una talla de pantalón 14 (42/44), en vez de la 30 que en 2004 le costó perder el papel de Adriana en Naxos, de Richard Strauss, en el Covent Garden de Londres. Su expulsión a causa de los kilos la llevó directamente a la clínica, pese al riesgo que corría de perder la voz. Desde entonces le encargan papeles con los que antes "sólo podía soñar", dijo hace poco al New York Times.
Otro caso famoso es el del ex futbolista argentino Maradona, que superó con éxito en marzo pasado una intervención del mismo tipo. Según Francisco Holguín, director de la clínica Medihelp Services de Cartagena de Indias -en la que fue operado Maradona-, el ex campeón mundial padecía el grado mayor de masa corporal, llamado obesidad mórbida, la más peligrosa.
Si se escucha a los cirujanos expertos, la reducción de estómago parece "la única solución" para el creciente número de obesos en Estados Unidos. En su encuentro anual, a principios de julio en Orlando, la asociación que los reúne presentó tres nuevos estudios según los cuales los ancianos pueden posponer de esta forma a más largo plazo la aparición de enfermedades como hipertensión arterial, diabetes tipo 2, graves problemas de estómago, así como el peligro de sufrir apnea del sueño.
En varios estados de EU las aseguradoras reconocen esta intervención como remedio a los gastos por enfermedades del corazón o diabetes y aceptan pagar el promedio de 25 mil dólares que cuesta. Florida se opone, ante al riesgo de efectos secundarios.
Muchos médicos y hospitales se han aprovechado del boom. Casi 150 mil estadunidenses se sometieron al bypass en 2004.