El lunes realizaron misión exterior para cambiar artefacto defectuoso
Astronauta del Discovery reparará en el espacio el escudo térmico de la nave
Moscu/Houston, 1º de agosto. La NASA decidió el lunes enviar un astronauta del Discovery para reparar el escudo térmico del transbordador; una misión sin precedente desde el comienzo de los vuelos de esas naves en 1981, informó la agencia espacial estadunidense.
La agencia decidió retirar dos trozos de fibra cerámica de la panza del transbordador para poner fin a cualquier "incertidumbre" sobre eventuales riesgos en el reingreso de la nave a la atmósfera terrestre, dijo Wayne Hale, vicejefe del programa de transbordadores de Estados Unidos.
El astronauta japonés Soichi Noguchi o el estadunidense Steve Robinson llevarán a cabo la reparación en su tercera salida al espacio prevista para el miércoles, dijeron funcionarios.
Estos dos astronautas del Discovery abandonaron este lunes la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés) para realizar una operación exterior que demandó siete horas, informó hoy la NASA.
Robinson y Noguchi salieron al espacio exterior de la ISS media hora más tarde de lo previsto, después de asegurar el estado del equipamiento para la operación.
Su misión consistió en cambiar una giroscopio defectuoso de la ISS, instrumento indispensable para controlar la orientación y estabilidad de la Estación Espacial Internacional. Según la NASA se trató de uno de los trabajos de reparación más importante durante la estadía de los astronautas en esa estación.
Con la instalación de este nuevo giroscopio no se tendrán que accionar más los motores de propulsión para corregir el curso orbital, lo que permitirá realizar mejor determinados experimentos que no se verán afectados por posibles sacudidas.
La tripulación deberá realizar arreglos en el recubrimiento término de la nave antes de regresar a la Tierra, ya que en la inspección del casco realizada el sábado se encontraron daños en varias uniones de las losetas térmicas.
En las partes afectadas hay material hasta de 2.5 centímetros que cuelga de las rajaduras entre las losetas. La NASA investiga si los daños podrían provocar recalentamiento, aunque sea leve, al ingresar a la atmósfera terrestre.