Campo nudista en salón vienés
Ensayan 300 personas el espejo con Klimt, Schiele y Kokoschka; Glantz y Tibol le restan valor
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Dos visitantes optaron por el bikini para participar en la exposici�ict�a convocada por el museo Leopold de Viena FOTO Ap
Foto: Ap
Unas 300 personas respondieron a la convocatoria del museo Leopold de Viena para asistir sin ropa a la exposición "La verdad desnuda: Klimt, Schiele, Kokoschka y otros escándalos".
El público llegaba al guardarropa, dejaba su atuendo, recibía en recompensa un boleto gratis, la edición de lujo del catálogo y, si ya estaba en cueros, unas sandalias que le arruinaban el desnudo total.
Consultada al respecto, la doctora Margo Glantz expuso que llamar a la gente para que asista desnuda sólo es un gancho, además de que los artistas exhibidos esta vez suelen presentar "situaciones genitales muy expuestas".
A su vez, Raquel Tibol opinó que es un experimento que ni asusta ni entusiasma, y nada aporta la convocatoria. "Lo que el fotógrafo Spencer Tunick hace es tan novedoso que lo de Viena es como si me rascaran el dedo meñique."